Capitulo 33 ¿Estas preparada?

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Aidan Gallagher

Desconfianza.

¿Sabes lo que es?, si en este punto si puedo decirte que es esto, ¿por que?, siempre he vivido con ello, todo en mi alrededor me da cierta desconfianza. Es un poco absurdo porque en un momento creí haber tenido confianza con ella, pensé que todo esta bien, pero en realidad cuando más lo sientes así, tu mundo está vuelto una mierda, con más dudas, más preguntas, más cosas de las cuales ni tu mismo sabrías explicártelo, estaba confundido, estaba pensativo.

Camino por los pasillos del instituto en busca de la chica que había entrado en mi mente y parecía no querer abandonarla, abro la puerta de su salón correspondiente por la hora, para verla sentada con Dylan, se veían que hablaban de algo interesante por sus expresiones, sabía que ambos se contaban cosas personales, y eso no me importaba mucho, eran cosas de T/n y el, yo no podía hacer nada anque fuéramos... no lo se, lo que suponía que eramos.

Me acerco con ellos para verlos que dejaron el tema de lado, abrazo a T/n para asentir en forma de saludo para Dylan. Volteo a ver a T/n para verla con una expresión algo perdida, veo a Dylan para verlo encogerse de hombros y no decir nada, vuelvo mi mirada hacia ella.

— ¿Algo que contarme Wilson? — pregunte sin dejar de verla a los ojos.

— Eh.. no, no nada, solo estaba pensativa, una cosa me pasa por la cabeza pero.. si solo es eso.

No digo nada para asentir sin dejar de verla, trataba de encontrar algo de mentiras en lo que había dicho, pero no se había frotado en ningún momento los ojos. Se para de su asiento para tomar su bolso y darme un abrazo, siempre solía hacerlo, pero sentía diferente la manera en que lo había hecho.

— Bien chicos tengo que dejarlos, mamá insistió en que fuera a la casa, creo que va a presentarme a su nuevo galán, nos vemos Ranita y Rarito —  se despidio para decirnos adios con la mano y marcharse.

— ¿Y que es eso que te pasa por la cabeza?

— Cosas ya te dije, pero de verdad no quiero hablarlo, ¿podemos dejar el tema?

Asentí para darle un pequeño beso en los labios, no era de los que demostraba afecto en público y menos enfrente de Dylan, quien parecía una ambulancia cada vez que lo hacíamos, porque si ya le habíamos dicho que éramos algo. Tomo el bolso de T/n para irnos y salir del instituto, necesitaba salir de aquí ya mismo, y lo peor de todo es que solo era el primer día.

Salimos del edificio para que T/n se subiera en su bicicleta y yo en mi patineta, ambos empezamos a andar, el camino fue algo silencio y eso sí que era sospechoso, con T/n nunca había silencio, pensé que ahora tendría a una T/n contándome todo lo nuevo, y nuevos chismes sobre Dylan.

Iba a preguntar si realmente se sentía bien, pero me había dicho que quería dejar el tema de lado, a lo mejor lo único que tenía es que estaba en esos días difíciles de la chicas y se sentía incomoda, aunque segun mi calendario debía decirme algo sobre eso, quizás lo tenía adelantado.

Llegamos enfrente de ambas casas, volteo a ver a T/n para invitarla a pasar la tarde conmigo, no quería que estuviera sola si sentía todas esas emociones juntas, asiente para seguirme a mi casa, deja la bicicleta en el porche con mi patineta para entrar, ambos dejamos las mochilas en los sillones para aventarnos en ellos.

— ¿Quieres hacer algo?

— Si, dormir, podemos subir, me duele la cabeza.

Asiento para subir ambos a mi habitación, abro la puerta para encontrar una cama destendida con algo de ropa por el suelo, un escritorio algo revuelto con varias cosas del instituto, si también mi habitación era un desorden a igual que mi vida, siempre dicen que las cosas se parecen a su dueño, pues si.

Una chica alegre y yo Donde viven las historias. Descúbrelo ahora