Li SuSu un Hada de 500 años en el futuro ha recibido una misión, viajar al pasado y detener al Rey Demonio antes que sus huesos malvados logren convertirlo en el más poderoso del reino entre demonios y seres espirituales. Li SuSu ha despertado en un...
Tan pronto como Susu recordó que esta persona estaría en el palacio mágico en el futuro, lo miró con cuidado y rechinó ligeramente las muelas traseras.
El joven frente a ella parecía tímido y humilde, pero Susu no creía que el rey demonio tuviera tal disposición cuando era joven, Lo más probable es que fuera falso. Innumerables lápidas conmemorativas destellaron en su mente, así como la cruel "Tumba de los Diez Mil Inmortales", lo cual aún era fuente para el rencor de los últimos sobrevivientes.
Susu sacó una caja de debajo de la cama, que contenía un látigo rojo sangre. Tantai Jin miró el látigo y lentamente apretó los dedos en su manga.
Susu lo miró. Es bastante pervertido decir que el propietario original era la cosa más enojada en el mundo por estar casada con Tantai Jin, y esta fue la razón por la que cada noche azotaba a su esposo hasta aliviar su ira.
Esto se ha convertido en una rutina, si no lo golpeo por una noche, todos pensaran que el dueño original está actuando incómodo.
Susu nunca había azotado a nadie antes, pero no quería ver este mal natural. Ella no cree que todos los monstruos sean malos, pero con este ella tiene la certeza que un futuro lleno de mal está esperando.
Se necesitan decenas de miles de años en el mundo para producir una persona que nazca con huesos malvados. Está condenado a ser la estrella solitaria de Tiansha, y gradualmente se volverá violento en temperamento, que incluso él mismo no podrá controlar.
Susu agitó su látigo, el látigo atravesó el viento y atacó al joven. Tantai Jin no lo esquivó, el látigo golpeó su pecho y retrocedió un paso tambaleándose. El joven miró a Susu con ojos tan laqueados como puntos de tinta. En sus ojos, Susu finalmente vio el disgusto y el dolor ocultos muy profundamente. Así es como debería ser el bien y el mal no son mutuamente excluyentes
Susu imitó las palabras del dueño original y lo azotaba todas las noches:
- "Es por tu existencia que la Sexta Alteza no está dispuesta a casarse conmigo, ¿por qué no te mueres?". Volvió a azotar al joven en el brazo.
Tantai Jin resoplo y su cuerpo tembló, ya había estado arrodillado sobre el hielo durante tanto tiempo que su cuerpo estaba ligeramente hinchado y dolorido. En este momento, los dos látigos fueron azotados en los brazos ya entumecidos, amplificando el dolor innumerables veces, y los huesos se retorcían de dolor.
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La mano de Susu que sostenía el látigo se detuvo, ¿parecía incapaz de aguantar más?, después de todo, un cuerpo mortal es muy frágil.
Susu respiró hondo y recitó el mantra del corazón puro varias veces en su corazón. Miró sus tiernos dedos, su tarea no era matar al joven Rey Demonio, e incluso si quisiera matarlo debería darle la oportunidad de una buena temporada y no humillarlo.
Desde que era una niña, su padre le enseñó a no intimidar a los débiles. El mundo no es benévolo y ve a todos como a un perro de paja. Aquellos quienes se cultivan como inmortales no deben tomar la iniciativa de crear karma.
