Remind me (Aki x tu)

Capítulo 8

Aki se había enfrentado al demonio katana por sí mismo, parecía haber acabado con él pero una mujer apareció haciendo que el demonio supuestamente muerto se levantara, ella tenia una expresión en su rostro de aburrimiento, tenía el pelo rubio con raíces marrones oscuras, empezó a hablar con el demonio Katana haciendo que vuelva a atacar y apuñaló a Aki en la zona del pecho.

Quise empezar a atacar por la ira pero fui herida en el abdomen con el mismo ataque, escupí sangre y todo se volvió negro.

Me estaba despertando, quise levantarme pero no pude por el dolor de la herida que estaba sangrando, las lagrimas recorrieron mis mejillas al ver a Aki y a Power heridos cerca de donde yo estaba, la única que quedaba en pié era Himeno, que estaba luchando contra los dos enemigos.

Quería ayudarla pero no podía moverme, me cambié de posición para vomitar sangre, mi traje estaba todo cubierto de ella por mi herida.

Vi como le decía algo a su demonio, no oía nada, pero este sonrió con una sonrisa maligna.

Ella miró primero a Aki, y luego desvió la mirada hacia mi, a ambos nos dedicó una sonrisa, no supe qué pasó después de eso pero ella se había ido de este mundo, no pude llorar en ese momento, me estaba quedando sin fuerzas a lo que me desmayé de nuevo.

Desperté y me di cuenta que no estaba en el mismo lugar que antes, estaba con una bata de hospital atada a una vía en la mano, estaba claro que alguien me había llevado al hospital, empecé a recordar lo que había pasado y lloré, acababa de perder a mi mejor amiga, el dolor me superaba.

Cuando me di cuenta entró una enfermera a mi habitación, me sequé las lagrimas y le saludé, ella me hizo una especie de cura en la herida del abdomen y me cambió la gasa, mientras estaba en su trabajo le pregunté.

—¿Hay un paciente registrado en este hospital con el nombre de Aki Hayakawa?—

—Ahora que recuerdo, si ese hombre llegó contigo, ¿es tu novio?— preguntó ella.

—No, solo somos compañeros de trabajo, nada mas, solo quiero verlo y que esté bien— le comenté.

—Pues mira, te digo ahora, voy a mirar el número de su habitación y vas a verle esta tarde— me respondió ella.

—Genial— dije con lágrimas en los ojos.

La misma tarde, fui por el pasillo del hospital, agarrada al palo de la vía que todavía tenía puesta para que a parte de que me aporte lo necesario, no podía andar muy bien por que me dolía y perdía el equilibrio.

Llevaba una expresión triste en mi cara y se nota que no quería hacer nada más que llorar.

Llegué a la habitación que me dijo la enfermera dónde se suponía que estaba Aki, sabía que estaba ahí por qué vi a dos personas que se me hacían conocidas, eran Denji y Power, ella estaba haciendo un escándalo en una maquina expendedora y Denji al verme me saludó.

—Hola ___, Justo íbamos a visitarte— dijo Denji con su típica sonrisa.

—chicos, me alegro de que estéis bien— dije con una pequeña sonrisa.

—¿por qué no entras? Él está preocupado por ti— me dijo.

—Si, Justo vine a ver si estaba bien, él me preocupa— le respondí un poco colorada.

—Te veo luego Denji— Le dije mientras entraba a la habitación.

—¿Has notado eso?— le dijo Denji a Power.

—¿El que?— dijo sin poner atención a lo que decía.

—___ tenía la cara roja— continuó Denji.

—No, no lo he notado, ¿y que?— dijo con su tono de siempre.

—Puede que esté enamorada— dijo Denji.

—¿Enamorada ella? ¡Por favor! Ha dejado muy clarito que no le interesa eso,¡métetelo en la cabeza bribon! ¡Ahora vámonos!— dijo Power empezando a caminar.

—¡Bueno las personas cambian eh!— dijo Denji enfadado mientras se marchaban.

Los había escuchado discutir desde que entré a la habitación de Aki, lo había encontrado llorando, como aquella vez cuando me acababa de mudar, sabía perfectamente las razones y estaba allí para buscar consuelo por lo mismo.
Así que en vez de salir, agarré mi vía y me dirigí hacia el, y le abracé como pude, ambos lloramos la pérdida de nuestra amiga abrazados mientras acariciaba su melena a modo de consuelo.

—Estoy aquí, tranquilo— le susurré sollozando.

El no dijo nada, después nos separamos del abrazo y le limpié las lágrimas con mis dedos, no lo había visto así nunca, me daba bastante pena, no sabía que era lo que le pasaba pero ese no era el momento de preguntarle, y también ¿por qué se tensó cuando mencionaron al demonio pistola? Estaba llena de dudas que solo él podía respondérmelas.

—creo que mejor me voy— le dije levantándome mientras agarraba de nuevo el palo de la vía.

—Quédate un rato más, por favor— me dijo mirándome a los ojos.

El tiene unos ojos preciosos de color azul, no me negué a su propuesta y me quedé un rato más, aún que ni habláramos nada, aún que ni siguiéramos llorando por Himeno, con tal de pasar tiempo con este hombre todo me bastaba, no me gustaba, pero había algo en el que me resultaba magnifico, después de conocerlo como es él en realidad.

Me gustaría poder ver otras de sus facetas a demás de las que ya me dejó ver, como un Aki feliz o un Aki asustado, ya que lo había visto varias veces cabreado con Denji y Power y sobretodo con Power.

—Cuando salgamos del hospital, y tengamos tiempo te invito a pasar un día entero tú y yo, solos— dijo Aki mientras me agarraba de la mano.

—Aceptó tu invitación— dije mientras le seguía dando la mano.

Ese agarre de manos fue simplemente increíble, nos quedamos los dos después de eso simplemente agarrándonos de la mano, como el otro día, podía ser un pasatiempo un poco extraño, pero se notaba que a ambos nos parecía jodidamente relajante, no somos pareja ni lo seremos pero disfrutábamos de la compañía del otro.