𝑬𝒍 𝑪𝒊𝒆𝒍𝒐 𝑳𝒍𝒐𝒓𝒂 [Tae𝑲𝒐𝒐𝒌]

🎐 03

Llege a mi casa con un poco de dificultad, la llave no quería entrar en la cerradura de la puerta principal, pero al final la pude abrir.

Entré y deje mi mochila al pie de los escalones, subí a la segunda planta y me dirigi hacia mi habitación, llege a mi cama y me dispuse a dejarlo recostarlo en ella cuidadosamente, para luego dirigirme al baño y sacar detrás del espejo del lavado, el pequeño botiquín de primeros auxilios; regrese y me dispuse a curar sus heridas.

Tenia sus nudillos colorados casi sangrando.
Una cortada un tanto profunda de extremo a extremo en la palma de su mano derecha.
Una gran cortada en su pierna izquierda.

Al parecer los tipos iban armados con armas blancas.

Me dispuse a mirar su pierna la cual se miraba un tanto grave, pero no lo fue, solo fue una cortada superficial.

Le puse unas curitas en sus nudillos de ambas manos;Y una gasa vendada en la palma de su mano.

Tal parece que no fue nada grave, entonces solo fue el cansancio del chico por haberse enfrentado con esos tipos.

Ya dispuesto a guardar el botiquín, volteo a mirarlo al rostro y me percató que tiene una pequeña cortada superficial en su mejilla izquierda, busque la pequeña bolsa de curitas del botiquín pero ya se habían terminado, así que busque en uno de los pequeños cajones de la mesita de noche que se encontraba a un lado de mí, y claro que encontré una pequeña caja de ellas pero eran con dibujitos, pero no era yo, rodie la cama del lado izquierdo para poder estar más al alcanze de su pequeña herida, así que con cuidado le coloque una en su mejilla sin tratar de molestarlo o tal vez despertarlo.
Ya puesta, pude mirar un poco mejor su rostro.

Un chico pelinegro de cabellera revoltosa, de piel clara, de labios delgados y rosados, un tanto fuerte como lo vi en ese callejón en el cual los tipos salieron corriendo, pero también un tanto pesado para mí; estuve observandolo un poco hasta que me percate que ya eran las 9 de la noche, entonces me decidí a tomar un baño, saque un cambio de mi cómoda y me adentre al baño del cuarto de visitas, creo que ahí pasare la noche.

Habiendo salido de bañarme, me dirgi nuevamente a mi habitación para ver si ya había despertado, pero no, se encontraba tal y como lo había recostado,
deje mi ropa en el canasto de la ropa sucia y me la lleve para la parte de abajo para lavarla, metí mi ropa a la lavadora y la encendí, deje la canasta a un lado de la secadora y me dirigí a la cocina, abrí el refri y tome una botella de té de limón.

Camine a las escaleras, recogí mi mochila y la lleve a la sala, me sente en el sofá, saque mi cuaderno de tareas, mientras ojeaba las hojas, frotaba mi cabello secandome con la toalla, que yacia en mis hombros, después me dispuse a hacer mis deberes ya habiendo puesto mi uniforme en la secadora, sacarlo, plancharlo, haberlo llevado arriba y colgado en mi closet.

Iban a dar las 11:45 cuando terminé la tarea ya cansado, metí mi libreta a la mochila, la deje en el sofá y me dirigí a la segunda planta para dormir, pero antes heche un vistaso al chico desde el marco de la puerta, aún seguía inconsciente, entre y recorri la cortina de la puerta que da al balcón, regrese y salí cerrando la puerta, me dirigí a la habitación de huéspedes.

La cual me término siendo útil ya que no imagine que viviendo solo, la necesitaría para pasar la noche?

Saque unas sabanas del closet y me acoste, quedándome dormido en un par de minutos.

A la mañana siguiente, fue como los demás, suena la alarma, después de que me haiga despertado unos minutos antes, la desactivo, me levanto, tiendo mi cama, voy a lavarme los dientes y me dirijo a mi habitación, giro la perilla de mi puerta y me sorprendo al mirar al chico recostado en mi cama, claramente se me había olvidado lo que sucedió ayer en la noche, me acerque a él y al parecer estaba dormido, así que solo lo deje, con saber que no estaba muerto era suficiente, me dirigí al closet, saque mi uniforme y entre al baño para cambiarme.

Ya cambiado, salí y cerré la puerta de la habitación nuevamente con cuidado y mientras pasaba por el librero del pasillo, me dispuse a escoger un libro para leer de camino a la secundaria, no encontraba uno que me interesara pero al mirar a la parte de arriba pude observar un pequeño libro de pasta azul crema con orillado azul marino brilloso, con un ligero y un tanto visible logo, pero no preste atención, así que tome el que tenia al alcanse.
Baje a la cocina y tome un Yakul del refri y una manzana del frutero, y salí de casa camino a la escuela.

No me preocupó el simple hecho de que deje a un extraño durmiendo en mi casa, total, no tengo nada de valor ahí, solo objetos que son reemplazables con otros comprados por mi padre y su dinero, así a sido siempre.

🎐

Fui el primero en llegar a la aula, como siempre, nadie llega antes de la hora de entrada, así que tuve un tanto de paz, sentado en mi banca y leyendo en libro que traje de mi casa, pero la tranquilidad no duro mucho ya que inmediatamente llego Jennie y fue directo hacia mí.

- Vaya que si llegas temprano - saludo sonriendo

- Es mejor así, me gusta que el campus este en silencio.

- Porque? - pregunto sentándose en el banco que se hayaba a mi lado

- Porque me gusta la tranquilidad y el silencio - respondí volviendo a mi lectura.

No tardó ni unos segundos en que ella había llegado e inmediatamente empezó a llegar el resto de la clase.

Ella se levanto y se dirigió a su asiento, dejándome tranquilo, claro que no se podría sentar en el banco de mi lado, ya que ese asiento era el de el nuevo estudiante de transferido, Jeon.

El día transcurrió normal, como siempre, bueno, para mí.

De clases de matemáticas a física, música, deportes, inglés y cocina.

A la hora de receso la pase en el tejado del campus, como siempre, comiendo solo, leyendo y escuchando música mientras miraba el cielo y cerraba mis ojos.

Ya después del las clases de aridmetica, social, entre otras.

Por fin llego la hora de salida, dándome así el placer de regresar a mi casa a relajarme, leer y estudiar.

Sin recordar que tenia un chico dormido y golpeado en mi habitación.