🔱 04 🔱

493 85 22
                                    

Seungcehol quería creer que Jihoon pensaría mejor las cosas si hablaba con él a solas, sus sirenas estaban metiéndole ideas erróneas sobre él, así que no sabía cómo acercarse al tritón sin que ellas estuviesen presentes.

Con el medallón quizás podría sumergirse en el mar y nadar hasta encontrarlo a él y a su hijo, podría llevarlos a tierra, en esa isla descierta, o si tanto desconfiaba de él, podrían verse en Marado y hacer el encuentro con todas las demás sirenas presentes (aunque no era algo que él quería).

Wonwoo comenzó a hacer muchas preguntas luego de haberse enterado que su amigo era padre, pero Seungcheol ni siquiera estaba prestándole atención, pues él estaba más concentrado en averigar la manera de hablar con Jihoon a solas; lo necesitaba y era lo único que quería por el momento.

—¿Cómo fue que ocurrió? ¿Por ser un hombre pez es capaz de embarazarse?— fueron las últimas preguntas de Wonwoo.

—Para empezar, ¿cómo se la metiste?— interrogó Vernon —es decir, tiene una cola, ¿acaso tiene un orificio o algo así? ¡Ouch!— recibió un codazo por parte de Minghao, quien pensaba que esa pregunta era inoportuna, aunque se cuestionaba lo mismo.

Pero el capitán seguía sin prestar ni la más mínima atención.

—¿Tienes idea de por qué no quiere que veas a tu hijo?— inquirió Wonwoo luego de un largo silencio, cuando Seungcheol finalmente levantó la vista de un punto perdido.

El pirata negó con la cabeza y respondió —ni idea. Aunque... tal vez le dije cosas que no quería escuchar, tal vez fui un estúpido y ahora cree que le hare daño a los dos. Él no es muy confiado, su padre lo engañó toda su vida y lo manipuló para su propio beneficio, así que supongo que ahora desconfía de todos, no sé si también lo haga de sus sirenas.

—¿Y qué quieres hacer?— volvía a hablar Wonwoo mientras los otros dos se mantenían callados.

—Me gustaría encontrarlo en el fondo del mar para que pueda conocer a mi hijo.

—¿Por eso robamos el medallón de Poseidón?— esta vez habló Minghao, a lo que su capitán asintió.

—Espero que eso me de la posibilidad de llegar más profundo, o al menos lo suficiente para que él no se sienta en peligro.

—¡Pues inténtalo!— exclamó Vernon.

Seungcheol lo miró pensativo y comentó —no sé si sea así de fácil.

—¿Por qué no? Dices que ambos están enamorados, ¿no?

—Sí...— murmuró con duda —¡sí!— exclamó estando un poco más animado —tengo que intentarlo— se puso de pie y salió del camarote siendo seguido por los demás. Los cuatro caminaron hacia el timón y Seungcheol dio la orden —gira hacia el oeste, iremos a la isla abandonada.

El piarata acató la orden y giró el timón para que el navío diera vuelta hacia el oeste y se dirigieran a la isla de los tesoros de Seungcheol, ahí podría sumergirse y encontrar a su amado en medio del océano para concoer a su hijo.

Seungcheol tenía una pequeña esperanza, deseaba con todo su ser arreglar las cosas con Jihoon y ver crecer a su familia aunque fuese pequeña. Sin embargo, aún tenía un asunto pendiente que resolver.

—¡Eres un mentiroso! ¡Dijiste que me liberarías a penas tuvieses el medallón en tu mano— gritó Jeonghan alterado, teniendo que soltarse de algunos piratas que lo estaban reteniendo para que no se acercara al capitán.

—No mentí, eres libre, puedes irte cuando quieras— respondió con calma.

—¡¿Y dónde se supone que desembarque?!— finalmente se liberó de los piratas y se acercó a Seungcheol de forma amenazante, pero no lo suficiente para imutar al capitán pirata —¡no te has dirigido a tierra en ni un sólo momento!

El rey del mar 2 [Jicheol]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora