Mr. Perfección y Miss miserable ~Broppy

Capítulo 9: Noticia

Ramón

Poppy: Ramón.... ¿De qué está hablando tú madre?

El día que me enteré, fue el día que más lloré por primera vez.

No podía contárselo, no quería verla sufrir. Pero ahora estaba aquí, intentando descubrir la verdad.

Tenía que decirle de una vez por todas.

Ramón: Poppy.... tú madre.

Poppy: ¿Qué le pasó a mi mamá?

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Ramón: .... murió en un accidente de tránsito.

Poppy: ¿q-qué?

Pude notar como sus ojos comenzaron a humedecer, y vi por primera vez una lágrima salir de sus bellos ojos.

Nisiquiera debería de pensar o decir esas maravillas en un momento trágico. Me hacia ver a mi mismo como un idiota.

No reaccione a tiempo para sostenerla, pero ella ya estaba saliendo por esa puerta, en la cual entramos ... a una velocidad que me aterrorizo a que haga algo malo.

Camine hacia la puerta, pero una mano atrapó mi brazo.

Felipe: Tenemos visita

Dijo mi padre avergonzado frente a toda la familia... nunca me importo su opinión o actitud, pero en estos momentos solo pensaba en Poppy ....me necesitaba aunque en estos momentos, posiblemente me este maldiciendo.

Agarre con mi mano libre la mano de él... la despegue de mi, sin perder la mirada.

Ramón: quédate con tus trapos sucios en tu maravillosa casa, pero yo me voy con mi futura esposa.

Solté su mano y salí del lugar.

No voltee a ver, no debía de hacerlo... sabía la actitud de todos. Estarían divididos, como mi corazón en estos momentos.

Llame su nombre por toda la mansión, pero ni un rastro de ella.

Mi terror aumento más.

Pero cuando pasaba por una de las ventana, vi.. no muy lejos a una Poppy deprimida, sentada debajo de un árbol.

Sentí un alivio, pero también un apuro de llegar a ella.

Salí corriendo, y al llegar ... la escuche murmurar algo, no pude distinguir que cosa... pero su voz era melancólica.

Dios, ahora me arrepentía de lo que esta pasando conmigo.

Me acerqué y me coloqué a su costado.

Ramón: El paisaje es maravillosa ... ¿puedo acompañarla?

Mi miró al iniciar mis palabras, note sorpresa en su mirada. Pero aún así, acepto mi petición.

Me senté a su costado, y no dijimos ninguna palabra en los próximos 5 minutos.

Y en ese aproximado pude notar de nuevo, una lágrima caer.

Ramón: No llores, por favor. -supliqué.

Poppy: ¿cuando pensabas decírmelo?

Genial, es directa .... y como choca sus palabras.

Ramón: yo ... ah.

Poppy: Estoy segura que ni siquiera pensabas decírmelo.

Si lo iba a hacer, en el momento oportuno.
Y ese momento no era hoy, en especial frente a todos.

Ramón: Lo lamento mucho, tu madre era una gran mujer. Hasta yo mismo la llamaría como mi madre.

Dio un respingon y limpio sus lágrimas de forma delicada.