¿Quién es el asesino?

〡05. La clave en los libros y los libros arcanos¹.

—Revisemos lo que hay en el bolso que trajimos —soltó Alex, más animado por las palabras del menor de los cuatrillizos.

Daniel rápidamente se paró de su lugar y busco el descolorido bolso deportivo que habían escondido entre sus maletas (por si algo sucedía) y se la extendió. Rápidamente el ojiazul comenzó a retirar todo lo que había en el interior y lo dejo todo sobre un espacio vació en el piso de la habitación.

Las fotos armaron un enorme montón y luego estaban los libros, que en total eran cuatro, estaban a un costado de estas. Danno tomo una de las fotografías y la miro atentamente. En ella se veía a una pequeña niña de unos cuatro o, tal vez, cinco años. Ella se notaba con la cara roja e hinchada, había algunas marcas en sus muñecas, pero no podía decir bien si eran o no lo que él pensaba, porque la pequeña pintura impresa en su mano estaba algo borrosa.

Al girarla logro leer un nombre "Bernabeth Calleros" y, junto a este, había una fecha "2005.12.07" 

—Creo que deberíamos buscar los nombre y las fechas en algún lado, para saber que ha sido de ellas —comento Sam.

—Sam tiene razón... —le siguió Son.

—¿Crees que deberíamos de buscar en internet? —Cuestiono Mark.

—Tal vez en la biblioteca haya algo también —agrego el pelinegro.

—Primero copiemos todo, porque sería raro llegar con todo esto a ese lugar y...

—May dice que todos saben todo, pero nadie sabe nada —termino Danno.

—Eso es lo que quiero decir —suspiro Sam.—Me dictan —pidió a los contrarios mientras elegía una nueva hoja de la libreta y esperaba para empezar a escribir.

—Bernabeth Calleros. Siete de diciembre del 2005

—María Pilar Méndez. Ocho de octubre de 2007

—Catorce de febrero del 2002; William Pelay.

Y así continuaron dictando nombre y fechas hasta que llegaron a los cuarenta. Ninguno de los cinco podía llegara a entender cómo es que cuarenta niños de, los que parecían ser, todas las edades hayan terminado en un lugar así o de esa manera.

—Saben, viéndolo de esta manera me recuerda a un libro que leí hace tiempo. En donde las fechas coinciden —menciono el mismo que había estado escribiendo minutos atrás.

—Hablas de "El misterio del valle"

—Sí ¿En qué parte vas? —Le pregunto Sam al pelinegro.

—En el problema del "otro lado" —respondió haciendo comillas con sus dedos.

—¿Cuándo la chica fantasma descubre como llegan a ese lugar aun estando vivos?

—¿Lo descubre? —preguntó con emoción el ajeno.

—No, no te diré más nada —balbuceo rápidamente el castaño —¡No al spoiler! —soltó haciendo una "X" con sus brazos sobre su pecho.

—Ya, concéntrense —dijo el más bajo mientras hacía chasquear sus dedos frente a los otros dos.

Alex iba a proponer el revisar los libros, pero el sonar de su celular lo distrajo y, al mirar quien era, suspiro. Agitó su celular en la mano en dirección a los cuatro contrarios y estos sólo asintieron.

—¿Ocurre algo? —fue lo primero que pregunto una vez contesto y cerró la puerta detrás de él. No iba a hablar con su padre frente a los cuatrillizos y menos por celular.

—Ey, hola —contesto su padre algo incómodo. —¿En dónde dijiste que estaban las cosas? Porque hay varias que no están dónde estaban antes.

Alex suspiro para no decir lo que estaba pensando. Claro, el mayor había dejado la casa hace ya nueve años y, mágicamente, esperaba encontrar las cosas como estaban antes. Era algo ilógico.