Estábamos en el medio de la clase, y la profesora no estaba mirando.
Toga era una perra, y yo estaba empezando a enfadarme.
Touya parecía estar envuelto en el dedo de esa zorra. El problema era que yo estaba enamorado de él, pero él amaba a Toga. Era incomprensible.
— Tomura, ¿podrías darle estas notas a Toga?
— Claro. Ahora mismo.
— Muchas gracias, cielo.
Cuando salí, estaba acorralando a Touya contra la pared mientras lo besaba. Él lo estaba disfrutando.
Quería ser ella. Quería estar con Touya.
Solo quería que llegara el recreo...
— Mamá, ¿por qué me siento triste? ¿Debería olvidarme de él o sentirme mal?
— ¡No, no, no! No te preocupes, solo...
— Cógela por el cuello.
— ¿Por el cuello?
— Por el cuello.
Papá interrumpió diciendo: "Por el cuello".
Por el cuello, por el cuello.
Papá me ordenó cogerla por el cuello.
CLASS FIGHT
— ¿Ves lo que lleva puesto? Está horrible... debería aprender a combinar o al menos a tener un poco de estilo...
— Realmente se lo tomó mal, Toga.
— ¡Solo lo estoy ayudando!
— Toga...
— Silencio. No entiendo por qué es así, solo fue un consejito de nada... ¿Me estáis escuchando?
Toga volteó, y me vio, así que vino a molestar.
— ¡Cuidado, Shigaraki!
Toga se abalanzó sobre mí. Me miró con una cara de psicópata que nunca antes había visto. Estaba sedienta de sangre. De mi sangre.
Sacó un cuchillo de detrás de su espalda y comenzó a rajar mi brazo. Estaba mezclando el dolor, con el enfado.
— ¿Qué coño?
Su cara estaba hecha una puta mierda, gracias a mí y a mis manos que en ese momento estaban ensangrentadas.
Estábamos en el recreo y todo estaba jodido.
La profesora vino a separarnos tras ahorcar a Toga.
Miré a Touya, parecía estar muy feliz de todo lo que pasaba.
Me miró, se acercó y me susurró al oído...
"Monstruo."
— Mamá, ¿por qué me siento triste?
— Shigaraki...
— Touya, yo debería irme ya. Me han expulsado.
— Lo que le hiciste a Toga fue increíble.
— ¿Increíble? Pensé que te gustaba...
— Qué va, solo era... una puta más tras de mí. Tú eres mucho más lindo, más auténtico... y más psicópata.
¿Todo esto era un sueño? Sentía mariposas en mi estómago.
Touya se acercó lentamente a mí, me acercó a él con un brusco movimiento y comenzó a besarme. Intentaba igualar la velocidad de sus labios torpemente.
Izuku, mi hermano, nos veía desde lejos.
