Historias Incubadas, Muertas & Otras Ideas

Pecados, Pecados... Ellos son muy malos

Esto es lo que origino 'Pecados de Stacy'... esta era la idea original. Un poco mas tétrica, un poco mas oscura, y con algo de violencia.

__________________

Peter Parker sintió tantas cosas cuando se enteró de la traición de Gwen que en realidad no sabía por dónde empezar... También estaba la traición de su esposa, Mary Jane, ella nunca se atrevió a relatarle lo sucedido, pensó que ella lo amaba lo suficiente como para contarle cualquier cosa, y más tratándose de algo así, pero tal parece que estaba equivocado. Para él, Mary Jane Watson era en realidad tan mala a sus ojos como lo era Gwen Stacy en su mente; ambas lo habían engañado, mentido y manipulado a su antojo.

Solo podía sentir dolor, tristeza, una ira y rabia incontrolables... Y odio. Odio hacia el maldito Norman Osborn, odio hacia la perra de Gwen... Y odio hacia su esposa, Mary Jane.

Sacudió la cabeza desesperadamente, alejando ese último pensamiento. Mary Jane no se merecía su odio, había estado con él la mayor parte del camino hasta ahora, ella había sido su ancla y su mayor apoyo. Había estado con él en los momentos más difíciles y había resultado ser una mujer muy comprensible y leal.

¿Pero hasta cuándo seria eso? No pudo evitar el pensar en su cabeza. Además, ¿No era ella también una mujer desleal al no contarle sobre Gwen y Norman?

Gwen, en su momento, también había sido una mujer leal y le había apoyado incondicionalmente. Siempre permaneciendo a su lado la mayor parte del tiempo, ella le quería, lo amaba, y se lo demostró en cada momento del tiempo que habían pasado juntos. Él le había devuelto ese amor con igual o incluso más intensidad, pero al final ella eligió serle infiel.

Nadie la obligo o incluso la forzaron a ello, ella decidió tomar esa decisión por sí misma.

El enterarse de aquello lo había destrozado por completo, no sabía cuánto tiempo se la paso llorando en una cornisa al azar, derramando lagrimas al enterarse de la traición de su antiguo amor. Solo sabía que no quería volver a pasar por algo así otra vez, no creía poder soportarlo una vez más, si acaso Mary Jane se atrevía...

"Peter..."

Levantando la mirada del suelo, Peter se paró frente a la puerta del departamento en el que vivía él con su esposa, y en la puerta abierta se hallaba dicha mujer: Mary Jane con ojos inyectados en sangre. La mujer pelirroja se hizo a un lado en silencio dejándole el paso para entrar, Peter avanzo entrando al departamento mientras su esposa cerraba la puerta tras él.

Sentados en el sofá, Peter observo a su esposa de pies a cabeza, se veía... Acomplejada. Jugaba con sus dedos de forma nerviosa, casi temerosa, con la mirada gacha mientras, debes en cuando, sus ojos miraban en su dirección. Pero rápidamente apartaba la mirada avergonzada cuando notaba que él la seguía mirando.

Los minutos transcurrían en un profundo silencio, Peter sabía que tenía que ser el quien hablara primero, Mary Jane había dicho todo lo que tenía que decir.

"Mary Jane..."

"¿Vas a golpearme?"

Peter arrugo el ceño. "No", dijo, y la dureza de su voz hizo su propio número en Mary Jane. La pelirroja se estremeció, encorvándose sobre si misma con temor. "Mary Jane, yo jamás te lastimaría"

"Yo...", gimió lastimeramente. Peter coloco su mano suavemente sobre su pierna, y ella se aferró a él con ambas manos como si su vida dependiera de ello. "Cuando te fuiste tan enojado, tan triste... Pensaba que te había perdido... No podía parar de pensar en cuanto debes odiarme..."