Tras haber sido salvado por Zeraora, lucario se quedó asombrado; ¿Por qué un absoluto desconocido le salvaría la vida?, pero sobre todo ¿Realmente tiene buenas intenciones, o solo lo aparenta?
"Yo umm... agradezco que me hayas ayudado pero, debería regresar a mi aldea; Mi amigo probablemente se esté preocupando por mí", decía lucario con una expresión de preocupación. Tan pronto dijo esto, resbaló de la rama en donde se encontraban los dos y cayó de espaldas hacia el suelo, haciendo que se torciera levemente tobillo. "AUCH!", exclamó el pokemon. "Cielos! Te encuentras bien?, pregunta zeraora preocupado, mientras salta ágilmente de la rama hacia el suelo . "Tú que crees?", decía lucario en un tono sarcástico. "Mira, por más que desees irte, estás herido, y con la hora, esos Pokémon de antes podrían convertirte en su cena. Que tal si pasas la noche en mi escondite y de paso veo cómo lidiar con tu herida?", comentó zeraora. "Porqué es tan amable conmigo...? Acaso quiere comerme?", pensó lucario. "S-supongo que solo esta noche.", respondió temeroso.
Una vez bajados del árbol, ambos se dirigen hacia el hogar de zeraora, y mientras caminan charlan un rato. "Oye... y porque vives en un lugar tan peligroso como éste? Solo llevo un par de horas aquí, y pude haber muerto", preguntó lucario. Zeraora aparta la mirada un momento antes de tomar aliento y explicar:
"Bueno... como hasta ahora has demostrado ser alguien de confiar, creo que puedo contarte... no siempre viví en este bosque, pero siempre me veían raro; nunca dijeron la razón, ni tampoco la necesidad, y eso me dolía ... cómo debería sentirme si mi mera existencia disgusta a las persona?... Un día me enamoré de un pokemon. La forma en la que hablaba y su actitud un tanto misteriosa me atraía bastante, por lo que un día le pregunté si quería salir a charlar un rato, a lo que respondió que sí. Me llevó al centro de la ciudad, por lo que pensé que quería mostrarme algo... cuando llegamos, me miró directo a los ojos, e hizo algo extraño en mí. No podía sentir mi cuerpo, ni tampoco moverlo. Luego se acercó a mí oído y dijo "Ahora verás lo que pasa cuando fenómenos como tú piensan que merecen ser tratados como pokemon". Luego? Me ató a un poste y llamó a todos los que estaban cerca... me golpearon, escupieron, y lanzaron su basura, solo para que al final abusaran de mí... Perdí el conocimiento, y todo lo que ocurrió de ahí en más me es bastante borroso, pero por alguna razón terminé tirado en medio de este bosque. Realmente no valía la pena volver, o intentar formar parte de la sociedad... al menos no si eres tratado como un fenómeno"
"Lo siento tanto, zeraora... supongo que independientemente de que o quien seas, al bosque no le importa, ya que siempre te da alimento, refugio, y hasta un bonito paisaje", dijo lucario. "Je... pensé que era el único que pensaba eso... me parece lindo que compartamos ese punto de vista", dijo zeraora mientras se sonrojaba. "A-ah... no es nada.", respondió lucario tambien sonrojado.
El ambiente se sintió un poco incómodo por el como ambos sentían cierto tipo de tensión, afortunadamente esta no duró mucjo; Habían llegado a una pequeña choza, aparentemente hecha con materiales del propio bosque"Ah! Ya llegamos", dice Zeraora contento. "Bien, el viaje entretenido, pero porque me cargaste en vez de haberme sostenido del hombro como haría un pokemon normal?". "Me gusta sentir tu calor en mi espalda", Zeraora dijo sin pensar, cosa por la cuál lucario queda extrañado; "Q-quise decir que me gusta probar mi fuerza y resistencia. Al vivir en el bosque, necesito ejercitarme seguido... por qué rayos dije eso?", dijo en un tono nervioso mientras flexionaba sus brazos. Lucario se sonroja una vez más. "Umm... y dónde se supone que duerma?", pregunto temeroso. "Bueno... nunca pensé que algo así pasaría, así que supongo que tendremos que compartir nido...", respondió.
La choza tenía un olor algo peculiar, y pese a no ser la cosa más cómoda del planeta, zeraora parecía estar feliz con este pequeño refugio que se había hecho. Era más que aparente el hecho de que el mismo zeraora lo hizo para tener un techo en donde dormir. Tras haber vendado su herida, Lucario se recostó en el nido, mientras que a su vez zeraora se estiró un poco y se echó al nido. "Sabes? No hubiera dudado en despedazarte camino aquí y comerte, pero creo que me hubiera dado diabetes por lo dulce que eres", dijo Zeraora mientras bostezaba. "I-ibas a comerme?" Lucario entra en pánico ante la declaración de Zeraora, a lo que éste se ríe y responde: Oye, oye solo estoy bromeando. Tranquilízate".
"Sabes algo? Siempre que voy a dormir suelo mirar al techo y hablar conmigo mismo sobre las cosas malas que me han pasado, pero hoy... creo que no hace falta. Siento que toda esta situación me ha ayudado a recuperar algo de mí... no sup-" Lucario intentaba charlar con Zeraora, pero el pequeño dialogo fue interrumpido por el suave ronquido de Zeraora, quien había caído dormido al instante. "Gracias por cuidar de mí, Zeraora. Siento que este es el comienzo de una muy bonita amistad", dijo Lucario con una cálida sonrisa. De repente, notó como Zeraora se volteó por completo, y sostuvo abrazó a Lucario con no mucha, pero no poca fuerza. "Buenas noches, felino del bosque", Lucario dijo antes de bostezar una última vez y caer en un profundo sueño.
Para el día siguiente, Lucario se había ido. Zeraora despertó solo su refugio, pero notó una nota dejada por el anteriormente mencionado. Leía:
Gracias por darme refugio anoche. Sé que no te gusta el estar con otros Pokemon por el cómo te han tratado, pero me espero algún día volver a verte. Si deseas verme, por favor pregunta por la residencia Fugoe Roladov en la aldea que queda al norte de aquí. Cuídate mucho, felino del bosque
-Lucario
Mientras tanto en la aldea, cinderace preocupado por su amigo le va preguntando a todos en la aldea si lo han visto, desafortunadamente no sin resultado; eso hasta que ve una figura familiar salir de entre la lejanía del bosque. Era lucario, con una venda en su pierna, y tierra en parte de su pelaje. Cinderace corre y le abraza con todas sus fuerzas: "Lucario! Me tenías súper preocupado... De verdad siento haberte metido en ese embrollo. Dónde te metiste esta vez? Incluso tyranitar me preguntó si te había visto. Paso un día entero sin alguien a quien molestar"
"Oye, oye estoy bien. Y no te preocupes, digamos que alguien ahí cuidó de mí...", Lucario miró con una sonrisa al bosque. "En fin, también te buscaba porque necesito ayuda para colgar los anuncios en la pared, y como no existen los martillos aún, eres el único que conozco que sabe usar cabezazo", Cinderace le explicaba a Lucario con un montón de circulares en mano. Y así, Lucario y Cinderace dedicaron toda la tarde a colocar los anuncios del festival aranja, el cual tomaría lugar en una semana. En esto, cinderace nota a su compañero un tanto pensativo, cosa que conllevó a preguntarle: "Oye, te sientes bien?, preguntó; "A-ah si, si... es solo la contusión de tantos golpes que ha dado mi cabeza contra la pared". Lucario sabía que no era cierto. Estaba mirando a la distancia el bosque, en donde yacía aquel pokemon con quién conectó de una manera tan extraña. Ambos estaban en situaciones tan distintas, pero a la vez tan similares, y mientras lucario pensaba en aquel felino del bosque, en algún lado del mismo, se encontraba Zeraora observando al horizonte desde la copa de algún árbol, pensando en Lucario.
"Y bien? Han dado con él?
"Por desgracia no, señor..."
"Par de idiotas, la luna nula está cada vez más cerca. Tenemos que encontrarlo lo más pronto posible... solo así seré libre"
"Sí, señor"
Fin
Hola de nuevo causas, aquí el escritor favorito de absolutamente nadie. Espero hayan disfrutado este capítulo. Realmente iba a subirlo ayer, pero decidí hacerle alguno que otro cambio al borrador. Eso sería todo por ahora, Bis später
-Naile
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💛Aura Electrizante💙 (Lucario x Zeraora)
FanficLucario es un Pokemon joven que ha pasado parte de su vida ahogado por angustia y la falta de confianza en sí mismo que le ha provocado la tragedia de perder a su padre... eso hasta que una sucesión de eventos desafortunados lo llevaron a conocer a...