Ya han pasado los años, aquel grupo de niños se distanció con el tiempo al momento de graduarse, cuando iniciaron sus carreras profesionales como futbolistas era evidente que se iban a reencontrar ya sea en equipos rivales o en el mismo equipo, la amistad se volvió a forjar cuando entraron a la selección mexicana.
Aunque en el caso de Emi regresó a Argentina participando en la selección de aquel país sudamericano junto con otros países extranjeros pero sin olvidar aquellas vivencias en México cuando era más joven junto aquel grupito, aunque eso cambió al reencontrarse años después siendo un poco mayores en un partido entre los países de cada uno.
Siendo que al final del partido Emiliano se reunió con los cuatro para proponerles salir a enfiestarse y claro que aceptaron volviendo a revivir su pre-adolecencia/niñez ahora a su manera de adultos, aunque de nueva cuenta volvió a separarse cuando cada uno se fue a equipos extranjeros aunque con ayuda de la tecnología volvieron a comunicarse pero un poco distante.
2019
En la mansión Ochoa Messi en Rosario Argentina. Sí, como lo escucharon el ahora portero mexicano Memo Ochoa se había casado con el amor de su infancia Lionel Messi que al llegar la noticia a los medios de sus respectivos países explotaron y más en México, porque, ¿un portero mexicano cautivando al gran astro argentino? era casi para una buena broma pero no lo fue. En fin, ahora casados y con tres hijos vivían sus actuales vacaciones de verano como se debía, o al menos para los chicos, que era no salir de su casa jugando video juegos toda la tarde algo molesto para su padre planeando varias actividades para pasar en familia.
-hola muchachos- dijo Memo entrando a sala con una caja rectangular en sus manos viendo a sus hijos recostados en el sofá jugando "COD" como ellos lo llaman
-hola papá- respondieron sus hijos sin dejar de jugar y mirar la pantalla
-Kevin, Valentin miren...- se sentó en el sofá de la izquierda dejando la caja en la mesa para después mirar como sus hijos no le ponían atención si no al juego, miró a la pantalla viendo aquel simulador de misiones peligrosas, también lo jugaba y admitía que era divertido pero lo que le molestaba era que los chicos se la pasarán todo el día ahí jugando haciendo una mueca de desagrado
-¿han oído de un juego serpientes y escaleras?- preguntó amable
-ammm, se me hace que sí- respondió Valentin sin dejar de jugar
-¿en serio?- respondió Memo con un rayo de esperanza
-sip, lo jugamos en el kinder- respondió Kevin aún jugando que hizo que su papá soltará un leve quejido por lo último
-sí, recuerdo que unos compañeros se agarraron a putazos por ese juego ja ja- dijo Vale divertido por el recuerdo seguido por su hermano mayor
-oh, amm bueno. Mis amigos y yo jugábamos mucho este juego de niños, íbamos al cuarto de uno de nosotros con refresco y papas-
-yo quiero tomar refresco- habló Valentin -¡Oye Antonela!, ¡Antooo!- le gritó para llamar a la amiga de su padre que los ayudaba siendo niñera de la casa por un tiempo, aunque Memo no le gustaba que la tratarán así
-envíale un whats, está lavando ropa- le sugirió su hermano haciendo eso casi que al instante dejando el juego, otra vez el portero soltó un suspiro pesado con fastidio por las actitudes de sus hijos seguido de escuchar el teléfono de la casa sonando de fondo
-oye ayer estuvimos en la casa de los Herrera, tienen una tele de 50 pulgadas, yo quiero uno- casi que ordenó Kevin dejando disgustado a Memo
-mira cuando seas portero del Standard te daré uno- dijo sarcástico -¡está sonando el teléfono!- gritó ya que todavía el teléfono sonaba todavía
-podría comer unas sabritas también- pensó en voz alta el menor mientras escribía el mensaje en su celular
-no envíes mensajes a la niñera- le reclamó su padre -¿sabes que es grosero enviarle mensajes a la niñera?, ¡solo levántate y ve a buscarla!-
-¡¿por qué si tú lo haces siempre?!- reclamó
-¡yo lo hago por mi trabajo!, ¡para ganar mucho y pagar tus mensajes!- en eso entró Antonela a la sala con lo que había pedido Vale en una bandeja -aquí esta todo, soda y papas-
-¿q-quien llamó por teléfono Anto?- preguntó Memo un poco más calmado
-lo siento Memo no lo sé, Bianca contestó- respondió apenada mientras acercaba las cosas a los muchachos y comían lo que trajo
-ay no descuida, gracias por tra...-
-¡¿qué pasó Antonela?!- se quejó el hijo mayor -¡estas son con extra sal!, ¡¿acaso quieres matarme?!- la queja dejó con extrañeza a la muchacha mientras al hombre le hizo casi sentir migraña -ay mejor regresen a los mensajes o a los videojuegos- se levantó del sofá rendido -no quiero volver a escucharlos decir eso- cuando empezó a caminar para irse del lugar observó como uno de sus autos estaba siendo conducido en el patio de manera algo inusual hasta chocar hasta una mesa de jardín y unas sillas, corriendo rápidamente afuera para ver que era seguido de sus hijos y Antonela
Casi al momento de llegar salió una pequeña como unos 6 años salió del auto corriendo en dirección al mayor hasta que se detuvo cuando lo tuvo casi al frente -no quise hacerlo, fue un accidente- se disculpó la niña recibiendo un abrazo preocupado por parte del guardameta
-no no tranquila mi vida, dime ¿qué tratabas de hacer?- se separó del abrazo con cuidado mirándola
-estaba tratando de usar la nave-
-¿la nave?, ¿qué es la nave?- preguntó confundido
-la nave del auto, para hacerle una pregunta-
-es el sistema de navegación boba- dijo Kevin
-shhh hey tranquilo- reclamó Memo por la repuesta del chico
-un hombre llamó, dijo que tu amigo el entrenador Piojo se había ido al cielo trataba de buscar el cielo para ti en Guadalajara, para que lo visites- la niña dió la noticia con inocencia, pero para su papá fue como un balde de agua fría en la espalda dejándolo con un sentimiento de shock y tristeza
-¿quien era tu amigo ehh?- preguntó con curiosidad la niña
-uhmm, el entrenador Piojo fue alguien muy especial en mi vida... Es terrible- no tenía más palabras para decir, tal vez se escuchaba casi desinteresado pero era algo muy triste para el -bien, ve a, tomar refresco y comer papas con los chicos ¿segura que estás bien?- la niña solo asintió segura, fue tomada de la manita por Anto tratando de calmarla un poco para ir adentro de la mansión seguido de sus hermanos dejando a Guillermo solo, se enderezó y con manos en la cintura miró al cielo soltando un suspiro profundo llenó de melancolía -...¿Tan rápido a pasado el tiempo?- se preguntó para el mismo en murmuró
Me iba a poner horarios para actualizar pero pura verga al final XD, en fin siganme en mis redes
Guayando
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ՏOᑎ ᑕOᗰO ᑎIÑOՏ | Shipps Fifas
FanfictionDespués de varios años y partidos separados un quinteto de amigos se volverá reunir por la muerte de su entrenador de su infancia junto una parte de su adultez, regresando con sus esposos e hijos a una cabaña en el bosque para poder pasar el mejor f...