Mon Sam Historias

A la caza (3)

"¿Qué haces? ¡Estas loca! ¿Te estas envenenando!?" dijo rápidamente Sam luego de analizar los brazos de Mon. Se podían ver como las venas más cercanas a las heridas poseían un color negruzco, lo cual eran una clara señal de envenenamiento. Lo cual era suficientemente tóxico para que le estuviera afectando el poder de regeneración de Mon.

"Tecnicamente me estoy alimentando. Soy como una planta, fotosíntesis".

"Una planta usa la luz, el agua y aire. Y tu necesitas sangre, y al parecer ni eso tomas".

"Sabia que en el fondo de tu corazón te preocupabas por mi" dijo Mon con una sonrisa, aunque eso significaba que Yuki había ganado la apuesta de que efectivamente Sam si se preocupaba por el pequeño monstruo. ¿Podría ser ese uno de los motivos del por qué había decidido no acabar con la vida (o muerte) de Mon? ¿Sam se preocupaba por Mon? Era mejor no caer en ese tipos de preguntas.

"No te des tanta importancia" replico rapidamente. "No me sirves si te mueres antes de acabar con esos lobos, o peor si esos lobos te comen a ti" dijo eso ultimo con un tono sarcástico, ya que sabia que para Mon no había peor humillación que morir a manos de esas bestias, especialmente bajo las garras del grupo de Kirk quien se había dedicado los últimos años en hacer la vida de Mon y de su clan imposible. Atacándolos inclusive en plena luz del día, algo un poco inusual para los lobos quienes prefieren de la fuerza de la luna para potenciar sus ataques.

"Jamas".

"¿Cuando fue la ultima que bebiste sangre?"

"Ayer"

"¿Ayer? ¿y ya necesitas alimentarte de nuevo?" La preocupación de Sam era tangible en ese momento. Todos sabían que un vampiro con unos pocos ml de sangre humana podía estar hasta un mes sin requerir mas. Claramente la situación de Mon era más severa de lo que la menor estaba dejando entrever.

"Si, el lado b de no beber sangre humana"

...

"Soy humana"

"Créeme lo se" contesto Mon quien ahora esta buscando algún sitio en sus muñecas que no estuviera afectado para poder extraer un poco de sangre y así alimentarse.

"Tengo sangre... humana" prosiguió Sam.

"Ni te atrevas a sugerir lo que yo creo que vas a sugerir"

"¿Por que?"

"Porque le prometi a alguien que no iba a afectar mas vidas"

"Sabes que eso lo dije porque quería que me dejaras en paz ¿no?"

"El morder de un vampiro es extremadamente doloroso" comenzó Mon taciturnamente. "Estarás fuera de ti misma por minutos. Desearas morir" la rabia ahora era palpable en el tono de la vampira. "Y luego cuando todo eso acabe y solo si es que tienes suerte perderás la consciencia por un par de horas".

...

...

...

"Pues, qué esperas ¿Quieres mi cuello o muñeca?"