IV. El lado de valentía

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El cielo rosado estaba vacío esa mañana. Una brisa fría movía lentamente todas las plantas del lugar. Una niña pequeña corría con su mascota, una extraña criatura de dos cabezas y cuatro patas, moviendo sus alitas, tratando de atraparla.

- Estoy aquí ¡Cuidado! - Dijo la pequeña. - Justo en el momento en que casi se lleva a su mascota, su madrastra apareció entre ellos.

- ¡Warmin! ¡Qué estás haciendo aquí!

- Yo... lo siento... solo estábamos jugando y...

- ¡Cuántas veces te he dicho que no puedes jugar, necesitas entrenar! - Tomó su mazo y mató al animal de un solo movimiento.

- ¡¡Cuidado!! ¡Por qué madre! ¿por qué? - Las lágrimas cayeron por su carita.

- Te lo dije... eres la elegida... tienes que prepararte para la guerra... el universo es cruel... si tienes alguno de esos estúpidos sentimientos humanos... serás destruida...

- Warmonga... - Llegó su asistente. - Los capturamos.

- Excelente... Los Doctores Possibles están aquí... Déjame tratarlos como se merecen. Hasta luego, mi querido Warmin, y recuerda, ve y entrena con Wartence.

La pequeña pelirroja se secó las lágrimas y vio cómo los parásitos devoraban a su amigo sin piedad... su madre tenía razón... si su propia raza la había abandonado... qué podía esperar.

...

- Milady... Tenemos noticias sobre... ellos... - Una voz masculina la despertó de sus sueños.

- Excelente... dame toda la información. - La joven, antes llamada Kim Possible, ahora Warmin, sonrió maliciosamente desde la oscuridad. Su momento ha llegado.

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– Casa de Wade - Anochecer

El nuevo equipo Possible llegó momentos antes, con una misión cumplida, en lo que a reclutamiento se refiere.

En el sótano, Shego y Monique estaban entrenando sus movimientos, peleando entre sí y descubriendo sus talentos. Ron se sintió cansado y decidió revisar a los otros miembros. Rufus estaba tratando de mostrarle a Drakken cómo usar una pistola, pero como lo supones, era muy difícil para el pequeño roedor, que estaba perdiendo la paciencia.

Ron siguió su camino y llegó a la habitación donde Wade estaba trabajando en algunos dispositivos.

- ¡Hola, chicos! ¿Cómo va el progreso?

- Excelente, tengo que admitirlo... míralo tú mismo. - El chico giró a la derecha en la pantalla de su computadora y le mostró unos gráficos que mostraban las ondas de control que creaban la malvada realidad, y cómo los dispositivos creados repelían tales ondas.

- ¡Excelente Wade! ¡Eres el hombre, nuestros escudos de muñeca! ¡Y vi tu nueva pistola láser! ¡Estamos listos!

- Casi... En realidad, necesito algunas de esas rocas para que funcionen.

-No más... aquí están...- Yori saltó por la ventana con una piedra mediana en sus manos.

- Espera un minuto... - dijo Ron, casi en estado de shock. - ¿Fuiste al Capitolio de los Lowardianes... sola?

- No te preocupes Imparable-san, fue un honor para mí...

-Oh no jovencita, no uses el "honor" conmigo... conoces la regla #1.

- ¿Todo el queso es para Rufus?

- No... nunca salgas solo... sabes que son muy peligrosos... hay que tener cuidado...

El otro Lado PossibleDonde viven las historias. Descúbrelo ahora