Locuras con el GRIT-SHAKA

Tercera Presa

*Narrador Omnisciente*

El troll no sabía lo que pasaba, Jim olía a sexo por algún motivo, pero eso no era lo que más le molestaba a él le encantaba cuando el olor a excitación se mezclaba con la esencia del pequeño humano, lo que le picaba en el orgullo troll era que ese olor se combinaba con el de un impuro, eso lo hacia sentir inquieto y no quería pensar de mala manera hacia el Trollhunter tampoco. Pero Draal estaría mintiendo a sí mismo si el pensamiento de Jim gimiendo su nombre bajo su gran cuerpo no le provocó uno que otro sueño húmedo en el pasado.

Pero no podía enfocarse en eso ahora, El Trollhunter le había dicho que estuviera junto a la tubería así que eso significa estar alerta. Probablemente había tenido un enfrentamiento con un impuro y tenía miedo de que atentaran contra su hogar. No obstante, había otra cosa que preocupaba al gran troll. Desde que Jim obtuvo el amuleto actuaba bastante confiado y sin miedo como debía de ser, aun así la nariz del troll no fallaba en percibir la clara esencia del miedo en el humano .

Cayó la noche, Draal ni se molestó en prender la luz, a diferencia de otros trolls él se entrenó a sí mismo para ver mejor en la oscuridad, dado que la puerta principal nunca volvió a sonar asumió que la humana llamada Barbu-rah , no iba a venir esta noche tampoco, la casa estaba en completo silencio y fue interrumpido por sonidos tenues y constantes que venían del piso superior.

Draal se puso en guardia y agudizó sus sentidos, no parecía algo que estuviera caminando o acechando en la casa, parecía algo que se movía dentro de uno de sus espacios.  procedió a acercar su oído a la tubería grande que captaba todos los sonidos solo para escuchar anonadado , gemidos. Un poco más y hubiera pensado que eran de dolor y hubiera salido corriendo del sótano para pelear cualquier cosa que estaría en la casa , pero no era eso. Eran gemidos de placer , jadeos que sonaban descompasados y resonaban en el metal unos más agudos, otros más largos.

No lo podía creer, no podía creer que en sus tantos años de vida Draal hijo de Kanjigar , hubiera tenido una erección por escuchar a un humano gemir .pero porque, porque los gemidos de Jim sonaban más necesitados, porque sonaban como un coro de placer , porque cada que paraban él quería más. No lo entendía , su miembro ahora era totalmente visible, sus prendas no podían ocultarlo.

Draal decidió alejarse de la tubería y dirigirse arriba, sigilosamente, tratando de no hacer ruido, lo cual en parte fue una tortura ya que a medida que avanzaba los gemidos sonaban más definidos. Caminaba lo más despacio posible para que la madera del piso no chirríe como lo suele hacer. Supo cuál cuarto era el de Jim al ver una tenue luz que se asomaba por la puerta semiabierta. Procedió a dar un vistazo, tal vez solo se masturbaría rápido y pretendía que nada de esto pasó en la mañana, pero la vista que recibió hizo palpitar su duro miembro.

Ahí estaba el Trollhunter con una mano pellizcando su pezón derecho estirándolo y jugando con él mientras su otra mano aventuraba su entrada. Tenía un dedo dentro y parecía no ser suficiente, la mirada de Jim mostraba un gran sonrojo en sus mejillas pero los ojos llorosos mostraban el placer que sentía.

- Mierda como .... mmf .... como llego a ese punto de nuevo - habló el humano mientras seguía tratando de llegar más adentro con ese dedo.

Draal empezó a acariciar su miembro, al mismo en el que Jim metía y sacaba ese dígito de su hoyo virgen, el troll no podía dejar de pensar en lo apretado que debería estar.

- Tal vez si ..... mmmm - Jim hizo una pausa para luego introducir un segundo dedo lo que provocó un gemido leve pero prolongado , quito la mano de su pecho y la dirigió a su pequeño miembro que estaba goteando líquido preseminal provocando más y más gemidos que eran melodía para el espectador del pasillo