Capítulo 60

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El cuerpo de Su Feifei se puso rígido. Ella no estaba acostumbrada a tanta intimidad e inmediatamente lo apartó.

Bo Silin cayó al suelo después de ser empujado por ella.

"Ay…"

Un grito de dolor resonó. Solo entonces Su Feifei recordó que Bo Silin todavía estaba herido.

Inmediatamente se acercó a ayudarlo a levantarse. "Lo lamento. ¿Te lastimé?"

Feifei frunció los labios y miró el rostro pálido de Bo Silin, sintiéndose un poco culpable.

Ella había reaccionado exageradamente justo ahora. Había olvidado que Bo Silin siempre había sido delicado, ¿cómo podía resistir un empujón tan fuerte?

Además, cuando cayeron por el acantilado, él fue quien la sostuvo y usó su cuerpo como un cojín para que no se lastimara.

Quería retirarse, pero Bo Silin la detuvo.

"Me duele la pierna." Bo Silin dijo con voz ronca.

Su Feifei miró a su alrededor y pensó por un momento. Luego, se quitó el abrigo y lo colocó sobre él. Entonces, se dio la vuelta.

"¿Adónde vas?" No me soltó y miró hacia arriba.

"Tomar la tabla de madera". Su Feifei señaló las tablas de madera y las cuerdas de paja no muy lejos.

Sólo entonces la soltó.

Cuando Su Feifei levantó la tabla de madera, no pudo evitar mirar su mano derecha y fruncir el ceño.

Aunque había estado en el campamento militar todo el año y había tenido contacto físico con sus subordinados, nunca antes se había sentido así. Sin embargo, esta era la primera vez que veía a alguien tan pegajoso como Bo Silin.

¡Qué inconveniente!

Quería decir algo, pero cuando vio a Bo Silin mirándola con un par de ojos inocentes, de repente sintió que estaba pensando demasiado y mantuvo la boca cerrada.

"Quítate las manos de encima". Su Feifei pateó su mano.

Bo Silin se lo quitó obedientemente con una sonrisa sincera.

Colocó la tabla de madera y ató la cuerda de paja.

Su Feifei sintió dolor de cabeza cuando escuchó a Bo Silin hacer una mueca de nuevo.

“Está bien, detente. Se hará pronto."

Después de que lo ataron, Su Feifei también le ordenó que no se moviera. "Solo dime lo que necesitas en su lugar".

"Quiero beber agua." Bo Silin dijo inmediatamente. No se avergonzó de pedir ayuda en absoluto.

Su Feifei tomó el tubo de bambú que acababa de hacer y se lo entregó.

Todo lo que hizo fue mirarla con sus ojos de cachorro.

Miró el tubo de bambú y levantó la barbilla. "¿Qué estás haciendo?"

Bo Silin suspiró suavemente y se frotó el brazo derecho.

“Estaba hablando contigo, pero no sé por qué reaccionaste tan fuerte. Cuando me empujaste, mi mano cayó al suelo y realmente no puedo usarla más... ¡Ay!"

En el segundo siguiente, Su Feifei lo agarró de la barbilla y le echó agua en la boca, lo que provocó que se ahogara. Inmediatamente usó su mano para empujar el agua.

"¿Qué ocurre? ¿No puedo alimentarte?" Su Feifei retiró la mano.

Ella estaba teniendo dolor de cabeza.

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