Capítulo 3. Realidad.

766 123 29
                                    

¡Hola! ¡Me emociona tanto que siga teniendo una increíble respuesta! ¡Gracias por leer, dejar sus estrellas y comentarios! Díganme que no soy la única que espero con ansias esta semana por un capítulo que no llegó. Había leído que fue un resumen respecto a lo que había sucedido hasta ahora y que por ello las páginas no lo habían subido, aun así esperaba poder ver un poco más sobre Kazuki y Miri. En fin, ¡disfruten el nuevo capítulo!

Disclaimer: Buddy Daddies y sus personajes son propiedad de su respectivo dueño, esta historia es hecha sin fines de lucro.

Más que un asesino

Por Franeej

Capítulo 3. Realidad

Rei volvió a despertar por el aroma a wafles con huevo que provenía de la cocina. Escuchó a la pequeña Miri pidiendo miel en su plato y la risa de cierto alfa que estaba a punto de atender la demanda de la pequeña.

"¿Fue un sueño?" El omega se levantó la camisa y observó su vientre, como si esperase que el diminuto bulto desapareciera por arte de magia. "Parece que no"

Salió de su nido, bajo las escaleras y tomo asiento en el comedor, al mismo tiempo que delante suyo aparecía un plato servido junto con un vaso con jugo de naranja. "¡Kazuki papá! ¡Quiero mantequilla!"

Rei comenzó a comer mientras que en su cabeza seguía dándole vueltas al tema de la noche anterior. No se percató de que su aroma se volvía agrio hasta que Kazuki empezó a liberar sus feromonas para calmarlo, aún no habían hablado sobre el cachorro de forma clara, sin embargo, esto parecía ser un comienzo. Con ello, el hombre decidió preguntar. "Kazuki, ¿ya lo pensaste?"

"¡Que tarde es! ¡Debo lavar la ropa!" El rubio se mostró nervioso hacía su compañero. Terminó su desayuno con un gran bocado para posteriormente colocar su plato en el lavabo para finalmente desaparecer en dirección a la lavandería.

"¡Yo también quiero lavar la ropa!" Miri saltó de su asiento y corrió detrás del alfa.

Rei no estaba seguro de como debía desenvolverse una dinámica familiar. Había conocido a Miri, que le hizo darse cuenta del gran contraste que existía entre ellos. La niña había viajado desde muy lejos para ver a su papá, a quien había visto morir, aunque realmente no lo conocía. Sin embargo, se veía feliz estando con ellos y tampoco parecía extrañar a su madre. Ya que la pequeña no mostraba signos de estar triste o preocupada, probablemente su núcleo familiar había estado bien hasta la fecha.

Luego estaba Kazuki, había escuchado por parte del rubio que había escapado de casa a una edad muy temprana y que en algún punto del camino se encontró trabajando para la organización. Aunque el alfa tachase su vida como algo erróneo, para Rei, funcionaba perfectamente bien. No tuvo a sus padres por tanto tiempo, pero aun así bastó para que él se convirtiera en un gran hombre. Era amable, gracioso, simpático y se preocupaba demasiado por otros. Kazuki se encargó de las tareas domésticas, iluminó su vida y con ello le hizo sentir que, por primera vez, estaba en casa.

Para Rei, cualquier cosa era mucho mejor que lo que él había experimentado y con lo que seguía viviendo. La familia ideal, poderosa y con un alto estatus no había hecho nada más que condenarlo. Era un omega anormal, incapaz de hacer cualquier cosa por si solo, por lo que estaba seguro que nadie encontraría un encanto en él. Nunca se había planteado la idea de formar una familia, ni estaba en sus planes sentar cabeza pero ahora que prácticamente era una realidad que sucedería lo que jamás creyó, simplemente lo aceptó.

¿Qué voy a hacer?

¿Qué vamos a hacer?

¿Cómo lo vamos a hacer?

Más que un asesino - KazuRei OmegaverseDonde viven las historias. Descúbrelo ahora