Dragones ASL

Capitulo 4

Abrió los ojos con dificultad, se sentía adormecida, no recordaba haberse dormido, ni siquiera podía recordar que había hecho el día anterior. Se sentó inspeccionando el lugar, parecía estar en una bonita casa de madera, era extraño, podía ver la vegetación entrando por las ventanas junto a los tempranos rayos del sol, no recordaba un lugar así en la aldea, sintió incomodidad es su brazo y llevó su mano a un extraño vendaje, poco a poco todo iba regresando. La quemadura, los dragones, Luffy, Arlong!! Intentó levantarse inmediatamente de la cama, sus piernas todavía débiles la hicieron caer, estaba aterrada, no tenía idea de a quién le pertenece la casa, quien la había raptado ni cómo seguía con vida, tenía que esconderse antes de que alguien viniera.

Meterse debajo de la cama jamás sería un buen escondite, lo sabía pero no encontró otro lugar para meterse rápido, su corazón latía desesperado mientras tomaba con fuerza la tela de su vestido, suplicando silenciosamente por su vida. Escuchó como alguien se dirigía a la habitación y como era de esperarse no tardaron en dar con ella. No presentó resistencia, no cuando se encontró cara a cara a la bestia que tal vez asesinó a Arlong en la forma de un hombre, le ponía los pelos de punta saber que esos monstruos podían camuflajearse tan bien entre los humanos, esta revelación jamás la dejará tener paz en el futuro. La llevó tranquilamente a un comedor donde estaba su compañero, no debía dejar ver el miedo que le provocaba su mera presencia.

Nami: disculpa, si no fuera mucha molestia, podrían explicarme porque no estoy muerta?- Fue muy directa, lo sabe, pero por lo menos debía intentar quitarse ese peso de encima primero, Arlong había sido muy descriptivo cuando le explicó cómo moriría si llegaba a alejarse demasiado, mantener la calma en esas condiciones era imposible.

Sabo: no entraré en detalles, solo te diré que la marca que tienes ya no funciona- respondió sin emoción alguna, la mujer no sabía si podría confiar en aquellas palabras.

Nami: cómo eso puede ser posible? intenté todo lo que estuvo a mi alcance, incluso quitármela con un cuchillo y no funcionó! Es que a caso todos los dragones pueden decir que humano es esclavo y cuál no?- el rencor se filtró en su voz a medida que hablaba.

Ace: no tienes que desquitarse con nosotros, estas viva señorita- a pesar de no ser frío como su compañero, se mostró desinteresado en su pesar, sea cual sea la razón por la que la salvaron no tenía que ver del todo con ella.

Nami: y con cuál objetivo? Que desean de mí?- quería irse, y la única forma de hacerlo era darles aquello que necesitaban cuanto antes.

Ace: es bastante desconfiada, no la culpo, queremos saber algo que tal vez pueda responder.

Nami: que cosa podría saber yo que ustedes no? La gente me pagaba para hablar de dragones y dudo que ustedes tengan una duda sobre eso.

Sabo: nuestra pregunta es sobre humanos, más que nada nuestro humano.

Nami: ahh? Nos conocimos hace dos días, no se nada de él - era ridícula su petición.

Ace: porque le desagrada al humano la marca?-Nami estaba ofendida, muy ofendida.

Sabo: antes que digas algo, no me interesa tu opinión, no somos Arlong, y no eres Lu.

Nami sentía pena por Luffy, esa mirada la había visto antes, cuando Arlong contemplaba sus tesoros, se podía sentir el vínculo inquebrantable de un dragón y su tesoro.

Nami: entendido, no son lo mismo, son completamente distintos- no tuvo más opción que decir eso, el dragón se veía cada vez más molesto, queria acabar esto para por fin disfrutar de su vida.

Sabo: bien dicho, ahora dinos, porque nuestro humano quiere quitarse la marca?

Nami: según lo que me dijo en la taberna, no quiere quemar gente que lo aprecia y supongo que tampoco morir virgen.