• Tres: Llegada

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Dicho y hecho pasaron las semanas y ambos, tanto como Aldo y Roier estaban en la estación de autobuses. Como buena gente humilde tomarían un bus para llegar a Monterrey. Obvio está, van por separado tenían distintos horarios y estaban en lugares diferentes.

Les llevó unas horas llegar a Monterrey, su lugar de encuentro era la casa del Mariana, pero este debería ir por ellos a la estación de autobuses, cosa que tuvo que hacer doble viaje. El primero en llegar fue Aldo, viajo a la mañana así que estuvo desde temprano con el Mariana, luego más tarde llego Roier así que Aldo acompañó a Osvaldo a la estación.

- Hey! ¡Aquí estoy! - gritó Roier cuando los vió.

Ambos chicos se acercaron a él para ayudarlo con sus cosas, pero antes lo saludaron como si se vieran por primera vez. Osvaldo le dió la mano seguido de un abrazo hombro a hombro, por la parte de Aldo se abrazaron al segundo.

- ¿Te fue bien en el viaje? - ya los tres cambiaban al auto del Mariana.

- Sí, nada fuera de lo normal. -.

- Entonces solo a Aldo les pasan cosas. - se rió Mariana.

Casi media hora de viaje contando anécdotas como ellos suelen decir, puras mamadas y risas. Pero más tranquilo para ser ellos.

- La Samy vendrá más tarde, ahora está en casa de F (producción)- comentó Osvaldo abriendo la puerta de su departamento.

- Okey, órale tienes un olor rico en tu depa. - tiró Roier.

- Pues sí, ¿creés que va oler a culo o cómo? - contracto Osvaldo.

- A mi también me sorprendió la verdad - añadió Aldo.

- Ya mien, ya no los quiero aquí. -.

Ambos se rieron y acomodaron sus cosas en la habitación vacía que por alguna razón, nadie sabía de su existencia. Ya de por sí tenían los colchones en su lugar pero les faltaba los cubre camas. Cosa que traería Rivers cuando llegará.
- ¿Qué les gustaría cenar? - preguntó el Mariana viendo su celular.

- A ti chiquito. - contestó Roier.

- Ay, goloso. - termino de mandar un mensaje y se levantó - Dentro de un rato viene la enana, va traer cositas para cocinar unos taquitos de chill.

- ¿Viene sola? -.

- Sí, es lo que dijo. -.

[Unas par de horas]

- ¿No qué muy puntual? -.

- Cállate pendejo y ayúdame con las bolsas. -

Se decían Rivers y el Mariana en la puerta del departamento, ya ambos se fueron con los otros que vaya a saber que hacían pero se estaban riendo demasiado. Rivers corrió hacia ellos para darles un abrazo a cada uno.

Luego comenzaron a preparar la cena ya que era medio tarde, como casi ninguno le sabía se comparaban con el juego One-armed Cook. Porque todo le salía medio mal, de todas formas la pasaban bien con música y chismes.

- Súbele al rolón. - dijo Aldo levantando los brazos y moviendo sus caderas al ritmo de la música.

- Nooo, que buena canción. - le siguió Roier.

En un segundo ambos chicos estaban bailando pegados, Aldo tenía su mano en la cadera de Roier y este de espalda haciendo un perreo hasta el piso junto al otro. Los demás miraban y de paso Rivers sacaba fotos.

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Sisi, ya sé que la estoy haciendo larga y con casi nada de interacción entre los protagonistas pero estoy haciendo como una... ¿Introducción? Algo así. Perdonen si es poco. En el otro cap ya va ver noche de sex- Digo, si gustan.(?)

En fin, ¿quién sería el pasivo en esté shipp?

Como los cubitos || AldoierDonde viven las historias. Descúbrelo ahora