IMPERIOS Y GUERREROS 🇦🇿⚔ ☁🔵☁🌠 (Actualizado)

II- La Guarida Oculta

Era la mitad de la Tarde en Jagdian, Jagdion irradiaba su fulgor como un gran rubí y el planeta parecía estar bañado en capas de oro fino, tal y como había sido formado desde el inicio del infinito.

Todas las criaturas que anidaban el planeta comenzaban a darle la bienvenida a un nuevo día, sin embargo al sur de las llanuras, yacía el temido, oscuro, hostil, e implacable Recklejagdian.

-"Recklejagdian; El sitio y lugar donde el polvo de la tierra sofoca y devora hasta el hilo del último cardo reseco y donde todas las criaturas corrompidas u consumidas por sus propios deseos, instintos, y su naturaleza primitiva se reúnen para ejecutar planes a favor del Regenté del Planeta... Su recompensa...

Todo lo que desearén les sería entregado y nada ni nadie podría quitárselos jamás u eso se decía."-

En aquel hostil y tórrido lugar, patrullaban las fronteras los más temidos guerreros del planeta, Los Darksiders, una poderosa raza con grandes habilidades en combate, dotados de poderes míticos inimaginables, capaces de destruir universos enteros, inteligencia sobrenatural, fiereza destructiva, la apariencia de un Elfo Lytherio, conocimientos de los druidas, caballeros antiguos y el carácter de un dragón enfurecido.

Alli el general Recklejagdiano y sus compañeros descansaban de su ronda diaria y relataban sus hazañas del día, mientras devoraban una gran cena constituida por carnes, panes glaseados con trozos de Kugawr, ensaladas con hojas de Drekaliok, acompañadas de caviar de perlado azul y gusanos guisados en salsa agridulce de copos crujientes del este, y consumiendo una bebida de color rosaceo, llamada Ekuealier.

Mientras los guerreros y su general consumian su gran cena, escucharon un sonido tan dulce como el brebaje que bebian, suave como el pelaje de un Feliro, calida como los rayos de Jagdion, y tan serena como el agua de los lagos.

-Señor, ¿De donde viene ese sonido tan melifluo y relajante?- Inquirió uno de los guerreros más jóvenes.

El Generál no había oído completamente la pregunta del joven, ya que la jornada había sido bastante pesada y extenuante, y por consiguiente estaba algo agotado, aunque sus ojos grises plomo reflejaban una gran indiferencia, en realidad el tono tranquilo del cántico estaba logrando que bajase la guardía y el sueño comenzara a apoderarse de su cuerpo.

Aunque, pronto se percató de su cansancio, se levantó del lugar donde se encontraba y se dirigió varios pasos adelante para rastrear la melodía, mientras sus compañeros lo seguían.

A medida que los guerreros avanzaban la mayoría de los presentes retrocedían ante sus pasos, temiendoles, y quienes trataron de avanzar hacia ellos los guerreros los lanzaron telequineticamente contra el primer objeto que tuvieran en frente, dejando varios destrozos a su paso.

Al acercarse Reconocieron a la criatura que emitía aquel sonido, era un joven Lytherio de ojos ambar, piel verde oliva, orejas pequeñas y en punta, con una camisa color marrón jengibre, túnica, y una calza de color rojo borravino con una cykthe en sus manos, portador de aquella melodiosa voz.

Nadie había escuchado hace mucho tiempo un canto parecido, su tono era tan dulce, calmo y relajante que cuando los guerreros se hallaron delante de él, antepusieron sus armas solo para disfrutar de aquel ambiente de serenidad.

El joven al verse rodeado por los guerreros, primero se vio sorprendido, dejando de tocar su instrumento, lo segundo que hizo fue observar a los guerreros y su general, quien media por lo menos tres cabezas más que el, sus fieros ojos grises estaban clavados en el, mientras este le observaba, noto como una de sus caucásicas manos se mantenía apoyada sobre una daga ubicada en el cinturón de su negra armadura, quizás esperando el momento justo para atacarlo.