Resulta irónico, mis padres y yo nos hemos mudado para no tener embrollos con otras personas, y sin querer me metí en una que me supera más de diez veces, no podría confiarle esto a nadie, pero tú, pareces de fiar.
Hace unas semanas que hemos llegado a este nueva colonia, muy alejada que lo que era nuestra antigua residencia, la cual tenía una tasa de delincuencia en crecimiento, y no queríamos pasar por alguna tragedia, razón de nuestra mudanza aquí. Al ser relativamente nueva la colonia, parte de las casas están aún sin usar, pero me agrada que hayan construido una escuela, en la cual, claro que estoy inscrito, aunque también no esté completa del todo.
En mi primer día, los padres no estuvieron presentes en la mañana para acompañarme, así que fuí yo solo a ver como eran las cosas, en la entrada había un alumno con el cual entable una pequeña conversación, de la cuál me enteré que era temprano para las clases, así que le pregunté donde había alguna tienda de abarrotes, dado que me habían faltado algunas cosas para mí lonche, me dijo que había uno a la vuelta de la esquina donde estaba el OXO en construcción, así que me dirijí hacia allá.
En el OXO ví que también estaba en construcción, y el que parece el líder de los trabajadores me pidió un favor, traer unas bebidas para sus compañeros, accedí cuando me mostro el dinero, después de unos minutos regresé con su pedido, me dio un agradecimiento y me regresé a la escuela, por que ya casi empezaban las clases.
Durante la primera semana me fue bien, las clases cumplían con lo estipulado, socialice con varios de mis compañeros y me llevaba bien con los trabajadores de la obra por los mandados habituales, hasta que hable con el compañero más solitario del salón.
En un receso me lo había topado saliendo del baño, al entablar conversación con él, uno de los temas que había tocado era que había escuchado que en los baño se aparecía una niña, me lo hubiese creído si fuera primaria, así que me mantuve escéptico, aunque él insistió varias veces, hasta que me propuso algo: que un día viniera a investigar y si no encontraba nada, me daría 100 pesos, pensé que sería dinero fácil, así que accedí.
Al ser viernes, esperé a que cayera la noche para investigar, en teoría, ni el de intendencia debería estar a esas horas, así que tome mi linterna y fuí a la escuela, me salte la reja de la entrada principal sin ser detectado, e investigue, pero no encontré nada, al día siguiente lo intenté de nuevo, pero con el mismo resultado, pero el día domingo fue que encontré algo.
Por la mañana salí a caminar, pero al andar por la entrada de la escuela, ví que estaba abierta, pensé que talvez en intendente estaría en labores de limpieza, pero no lo ví por ningún lado, así que me dije: "una más y es todo", pero esta vez al entrar a los baños, todo se había oscurecido, las paredes empezaron a secretar un líquido verde, la temperatura cambió a tal punto que se notaba el vapor en el aire, y entonces la ví, ví a la niña pasar por el pasillo con una risa burlesca, salí rápidamente de ahí por el susto a tomar un poco de aire fresco, entonces volteé al cielo y se había vuelto de noche, no tenía ninguna explicación posible, respiré profundo y trate de mantenerme en calma, entonces noto un camino de pisadas verdes, el cual decido seguir, me llevaba por en frente de unos salones, hacía un depósito de agua, unos metros antes de llegar al depósito, la niña se manifestó de nuevo subiendo unas escaleras, las cuales seguian el sendero, continuando el camino, veo a la niña una última vez entrando a lo que iba a ser un comedor bajo techo, en el cual, además que que el sendero acababa, encontré una nota escrita. Básicamente era una carta de presentación de una niña llamada Jolie, que tenía 16 años y una vida perfecta, que era víctima de buling por parte de unas compañeras, y que había perdido varios útiles escolares: su lápiz, cuaderno y mochila, aunque también estaba donde las vio por última vez, no sabía si seguir investigando, pero mi curiosidad pudo más, así que primero busqué el cuaderno por el área de los baños, esta estaba en el inodoro donde la niña había entrado con anterioridad, dentro tenía una nota con una foto del área del depósito de agua, así que asumí que estaría allí, en efecto, la mochila estaba ahí, al guardar el cuaderno encontré otra nota con otra foto de una área en construcción, reconocí esa zona como la cancha de basquetbol, al revisar por los alrededores encontré el dichoso lápiz sin nada más, sin nota, sin foto, nada, ahora más que sentir curiosidad, era una problemática, no me podía quedar de brazos cruzados y decidí llegar al fondo de esto, vaya error cometí.
