Arrojado hacia atrás (Thrown Back).

Capitulo 16

"Como tarea, quiero que me des doce pulgadas sobre tres hechizos de fuego específicos y sus usos en situaciones defensivas", dijo Connie cuando la clase llegó a su fin.

"Le daré doce pulgadas", dijo Avery sugestivamente.

"No sin varios galones de solución de expansión", se burló Bellatrix.

Harry sonrió mientras Avery se sonrojaba de ira y vergüenza. Su mano se movió hacia su varita, pero Nott tuvo suficiente sentido común para sacarlo del salón de clases antes de que pudiera hacer algo estúpido.

"Señor. Potter, ¿podrías quedarte un momento?" preguntó Connie.

Harry asintió y se volvió hacia Lily, que estaba junto a él.

"Te veré en la cena", le dijo.

Sonriendo, inclinó la cabeza hacia arriba y lo besó en la mejilla antes de irse con Marlene. James, que había estado hablando con Sirius, se detuvo y lo miró con furia antes de agarrarlo por la espalda y salir corriendo del salón de clases. Suspirando, Harry se dio la vuelta y se acercó al escritorio de Connie.

"Harry, necesito un favor", dijo Connie. "Uno de los casos en los que trabajé irá a juicio el viernes, y esperaba que pudieras hacerte cargo de mis clases de primer y segundo año ese día. Debería estar de vuelta antes del almuerzo, así que probablemente solo perderías tus clases de la mañana. Ya lo aclaré con McGonagall".

"Claro", dijo Harry. "¿En que estas trabajando?"

"Gracias", sonrió. "Tendrás a los de primer año por la mañana, y ambas clases están trabajando en el maleficio de petrificación. Los de segundo año están aprendiendo el encantamiento escudo. Ah, y tendrá plena autoridad para tomar puntos y asignar detención mientras enseña. Si alguien te da demasiado problema, díselo a McGonagall y ella se encargará de eso".

"Está bien", dijo Harry.

Mirando a su alrededor para asegurarse de que la habitación estaba vacía, Connie lanzó un hechizo silenciador rápido a su alrededor.

"¿Todavía estamos en pie para esta noche?" ella preguntó.

"Sí", asintió Harry. "Encuéntrame en el Hall de entrada a la una".

"Te veré entonces", sonrió Connie mientras soltaba el encantamiento silenciador.

Devolviéndole la sonrisa, Harry saludó y salió del salón de clases. En el pasillo, encontró a Lily, Narcissa y Bellatrix hablando en susurros. Era una vista inusual, y estaba agradecido de que no hubiera nadie más en el pasillo. Si bien las chicas se llevaban sorprendentemente bien en privado, no pasaban tiempo juntas en público porque Narcissa no quería que sus padres se enteraran de su relación con Harry.

Claro, la mayoría de los Slytherins ya sabían sobre su relación secreta, pero no hablaron de eso por dos muy buenas razones. La primera era que no querían admitir que habían perdido a dos de sus chicas más destacadas y deseables por culpa de un Gryffindor, y la segunda era por miedo a Bellatrix. Era bien sabido dentro de la casa de las serpientes que había dejado a Rudolphus completamente impotente. Estaba demasiado avergonzado para hablar de ello, pero había rumores de que incluso los curanderos de San Mungo podían curarlo.

"¿Está todo bien?" preguntó Harry.

"Acabamos de recibir una carta de nuestro padre", dijo Narcissa, sosteniendo el pergamino. "Nos dijo que intentáramos acercarnos a ti. No lo dijo, pero estoy seguro de que el Señor Oscuro está detrás de esto. Padre nunca se arriesgaría a mancillar nuestra reputación de lo contrario".

"Voldemort estaba obligado a interesarse por mí después de que eliminé a Greyback", suspiró Harry. "Entonces, ¿cómo quieres manejar esto?"

"Eso es justo de lo que estábamos hablando con Lily", dijo Narcissa.