En los vestuarios del instituto miré por unos segundos a un chico que salía de la ducha, un cosquilleo conocido recorrió mi vientre bajo. Aparté la vista de inmediato y salí de allí casi corriendo, sin ducharme. Volví a casa y no salí de mi recámara en todo el día.
No fue la primera vez.
No miraba a los chicos de mi instituto queriendo ser ellos.
No los miraba con envidia.
Los miraba con fascinación y algo más... deseo.
Aunque, no era lo mismo que cuando miraba a Asher, con él todo era diferente, más arrollador, más fuerte.
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Asher y Brandon
RomanceMe enamoré de unos ojos que nunca me miraban, de una sonrisa que nunca se formaba al verme, me enamoré de una persona que no sentía nada por mí, me enamoré de alguien que no se emocionaba al escuchar mi nombre. Y estoy seguro de que fui el único qu...