Exceso de inspiración

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Como si fuera un instinto, mi corazón pidió que prestará atención al ventanal que da al edificio de enfrente.

Cuanta razón tenía.

Frente a la entrada del edificio la veo llegar, e inconscientemente sonrió.
Entra a su edificio y soy consciente de como mi corazón estalla contra mi pecho, está eufórico.

Respiro una y otra vez, y aprieto mi guitarra contra mí al mismo tiempo que tomó asiento frente a una de las mejores ventanas con vistas de mi apartamento.

Necesito aire.

-Hola, vecino.

Y mi corazón sufre un ataque al que sobrevive heroicamente, cuando en mi atmósfera aparece su voz.

Abro los ojos y sonrió de lado, levantando tímidamente mi mano para saludar.

-Hola, ___. ¿qué tal el trabajo?
-No muy interesante- dice alzando los hombros para restar importancia de verdad.- ¿Qué dices tú? ¿Cómo va la canción? ¿La has terminado ya?
-La verdad es que no.- respondí con sinceridad.

Su rostro cambia completamente, su sonrisa brillante cambia a un gesto más serio e interesado.

-¿Por qué? ¿Es un bloque creativo?

Si ella supiera.

-No en realidad, creo que es lo contrario.
-No entiendo.
-Tengo... Exceso de inspiración.

Y ahí está de nuevo esa sonrisa que desorbita al planeta, pero te recuerda que aún estás en la tierra.

-Oye, pero eso suena muy bien, es bueno ¿o no?
-Claro, fácil podríamos escribir tres canciones con la inspiración.
-Bendita musa- dice tras un suspiro.

Ni te imaginas.

-Por eso no sé cómo empezar o en que seguir.
-Hazlo.

Por un momento me veo perdido, y la veo con ese gesto de necesitar ayuda.

-Escribe las tres canciones- continúa- seguro tendremos álbum más pronto de lo que crees.

Sonrió como un bobo mientras imagino muchas cosas, ____ es el secreto entre los versos de mis mejores canciones.

-Lo intentaré...

Y como no quiero que la conversación acabe...

-Por cierto, ha llegado hoy tu correo- me arrepiento enseguida de hacer un comentario tan directo- es decir, es jueves y llega el correo de todo el vecindario...

Su risa tranquila y real inunda seguro nuestra atmósfera de vecinos del séptimo piso. Hablar con ella aunque debamos hablar/gritar por tener la separación de la calle de enemiga, poniendo distancia entre nosotros, parece una experiencia inigualable.

-Es verdad, pasaré por él en un rato, lo he olvidado antes de subir a mi piso.  Gracias, Alejo.
-Es un gusto, ____.

La veo acariciar la anatomía de un par de tulipanes amarillos en la esquina de su ventana, y luego pone en la maceta un par de hielos para su cuidado.

-¿Escucharé alguna canción tuya pronto?
-Serás la primera en escucharla.
-¡Eso es un trato, Alejo!
-Claro- sonrió con emoción.

La sonrisa me es devuelta y de nuevo esa euforia a flor de piel.

-Hoy pasa el estreno de un capítulo de una serie que me encanta.

Apenas inicia ese tema del que soy un conocedor, la chispa le brinca al rostro y los ojos se le iluminan de magia. Todos los jueves va directa al sofá con un café en mano y puede llorar, reír, sufrir y emocionarse con lo que sea que pase a las 6:30 en su TV.

-¿Y es interesante?
-Es una belleza, la fotografía del lugar es impresionante, la trama es perfecta y los personajes...- de nuevo un suspiro...

Y con eso estoy a nada de sacar papel y pluma para iniciar a dedicarle una nueva canción.

-Suena interesante, tendré que verla.
-Sí, si tú quieres un día podríamos...

Puerta, estoy seguro que han llamado a su puerta. Su atención fue directa a ella y su emoción resulta evidente, estaba esperando que eso sucediera.

-Disculpa, voy a atender.

Desaparece de forma inmediata y me siento perdido, de nuevo.

Me siento un espía, pero muero de la curiosidad.

No escucho mucho, eso antes de que pegue un grito:

-¡AANDYYY!

Y odio tener una vista panorámica a toda su casa, se arrojó a sus brazos para envolverlo en un gran abrazo, el chico alto de cabello rebelde y Moreno trae flores en su mano izquierda. Son rosas, nisiquiera sabe que prefiere tulipanes.

En mi cuerpo entero hay un recorrido eléctrico de disgusto.

Muy bien, Alejandro. Seguro en el álbum tendremos canciones de desamor.

No puedo evitarlo, mis vistas dan directo a su casa, y ella como yo, odia usar las persianas. Esta preparando café, ese que no tardará en dar aroma a todo el lugar, está animada charlando y yo estoy detestando que haya llegado antes de que su serie favorita inicie.

Las flores están en agua, y él sentado frente a ella.
Juguando con la taza gris que evita usar. Luego, a un par de minutos, ella va directa a la puerta de nuevo, está vez es una chica a la que poco he visto por aquí.

Cuando he decidido que es suficiente, dejó caer mi cuerpo desaliñado en el sofá, pienso en mil formas de acomodar frases para sacar el lío de mi corazón, pero ahora nada sirve mucho.

Dos minutos y treinta propuestas en mi cabeza después, la puerta es golpeada con suavidad.

No quiero abrir, Alejo no está.

Tocan una vez más y me obligó a mi mismo a atender de buena gana.

-Hola, Vecino.

El revoloteo de las mariposas me sorprendió de nuevo, tenía esa preciosa sonrisa que me confundía.

-¿Qué haces aquí?- dije sin analizar.
-Me preguntaba si podrías prestarme tu TV.
-¿Mi TV?
-Andy llegó a casa, le prometí que le presentaría a Clem, una amiga, pero los chicos se han puesto verdaderamente cómodos en el departamento. Me gustaría ver mi serie con un poco de tranquilidad, ¿quisieras verla conmigo?

¿Esto es un sueño?

-Yo...
-Puedo prepárar café, prometo que me queda increíble.

Moriría por ver su rostro al escuchar aquella canción que habla sobre lo mucho que anhelaba probar el café de sus mañanas y el de sus tardes.

-Esta bien.
-¡Eres el mejor, Alejo!

Y como si fuera algo natural, se pasea por mi lugar seguro como si lo conociera bien. Ha tomado las tazas y se ha puesto en marcha.

-Te encantará la serie, Alejo.
-Yo espero que sí.
-Por cierto, deberías invitarme a salir un día.

Me quedo sorprendido de lo que escucho.

-Si yo pudiera, también te dedicaría un par de canciones.

Y mi corazón, salió intacto de tal confesión, pero seguramente feliz de tener más inspiración.

--*--

Hola, he regresado ✨❤💭

-SHS

One Shots- TIMØDonde viven las historias. Descúbrelo ahora