✧ ᶜⁱⁿᵉ ✦

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- Se ven tan tranquilos

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- Se ven tan tranquilos...

- No sé si debamos estar aquí viéndolos dormir. Es un poco...aterrador.

- Solo un poco más.

- Amor miralos, son preciosos.

- Quiero una foto.

Buda fue lentamente abriendo los ojos. Escuchaba los susurros de un montón de voces desconocidas muy cerca, pero estaba demasiado cómodo como para moverse.

- ¿Serán pareja?

- Estoy casi seguro de que si.

- Son muy tiernos.

- Que interesantes símbolos...

- ¡Nikola no lo toques!

Y en un violento movimiento el iluminado atrapó la mano del invasor, quien lo miraba perplejo.

Parpadeo, notando no solo uno, sino siete intrusos que lo miraban fijamente.

- ¡Buenos días! - saludo a quien reconoció como Quin, uno de los ganadores del Ragnarok - ¿Tienes algo de comer?

- Ah...- guardo silencio, terminando de despertar.

A su lado, Zerofuku seguía durmiendo abrazado a su torso. Su respiración tranquila chocaba contra la piel desnuda y le daba escalofríos. Sonrió, soltando su agarre sobre el ”mago” y pasándola por el cabello del joven dormido.

Oh, verdad, hay extraños en su casa.

- ¿De donde salieron ustedes? - los repaso a cada uno.

El padre dela humanidad, sentado en unos de los sillones de la habitación, lo saludo sutilmente con la mano antes de dar su explicación.

- Nos perdimos de camino a una sala llamada cine.

- Simo tuvo la idea de entrar - lo delató Okita, apuntando al hombre de blanco.

- Gracias hermano, siempre he confiado en ti.

Buda bufo. Sabía que los humanos eran unos desquiciados, ni siquiera se esforzados en pensar como es que entraron.

Les daría un poco de comida y se contactaría con Brunhilde para que los venga a buscar.

- Adán-Chan, Eva-Chan - ambos lo miraron, la rubia no había dejado de ver a la deidad durmiente con ternura -, ¿Podrían esperarme en la sala con sus hijos?

- Claro, pero aún no tengo mi foto...

- Cariño - la mujer poso su mano en el hombro de su esposo -, tenemos que darles privacidad a los enamorados - el adolescente más fuerte de todos se atragantó con su saliva.

- ¿Cuanto llevan juntos? - Sasaki los observaba atentamente desde el borde de la cama.

- No mucho, seguro es su primera vez durmiendo juntos, yo digo que aún ni siquiera son pareja - Nikola ignoraba totalmente el espacio personal del dios, examinando y tocando los símbolos en su rostro.

𝒟ℴ𝓂𝒶𝓇 𝒶 𝓁𝒶 𝕱𝖎𝖊𝖗𝖆 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora