¿Dónde está mi Bebé?

Capitulo 2

18 años después.

Sky

Acariciaba la ropita de bebé entre mis dedos, mi corazón apretandose dolorosamente como vez que recordaba ese maldito día.

Mi mente me llevaba al miedo, al dolor y la traición al ver que no había importado nada, mi propio hermano me dejó allí para morir, me separó de mi bebe, me destruyó la vida.

Recuerdo claramente el miedo cuando empezaron los dolores y el no caía el teléfono de mi esposo, solo estaba con Gun en la casa y aún cuando todo el mundo toda mi vida me decía que solo era ni imaginación, en mi corazón sentía el odio de Gun hacia mi... ¿Lo peor? Le tenía miedo.

Mi miedo subió a pánico cuando no me respondía, no me podía mover y no quería que le pasará nada a mi bebé... El parto fue difícil, el dolor era innombrable pero todo se vio compensado con la tranquilidad de escuchar a mi bebé llorando... No me importaba el dolor, no me importaba que apenas me podía mover, había logrado traer al mundo a mi bebé a salvo.

Hasta que empezó a moverse la casa, los gritos al rededor, las cosas cayendo el terremoto fue real, tan real como la impresión que me dió mi hermano al verlo en la puerta.

Un ángel con una mirada de demonio y con toda la frialdad del mundo me quito mi bebé y con toda la satisfacción me dijo que sería la venganza perfecta.

Los brazos de mi esposo se apretaron a mi alrededor, sosteniendome y conteniendome para no romperme en miles de pedazos, aún no podía entender porque alguien albergaría tanto odio como para separar a un bebé de sus padres de esa manera, aún no podía entender por que un hermano le haría eso a su familia.

-Sky vamos...

-No puedo... Aún me duele mucho...

Un toque en la puerta llamo nuestra atención y después de autorizar que entrara pude ver a Phayu que tenía un sonrisa suave y sin que le dijeramos nada se agachó abrazando mis piernas y poniendo su cabeza en mi regazo.

-Mama, no estés triste...

-¿Quien es mamá mocoso? Soy tu Papi Sky no soy mujer para que me digas Mamá...

-Siempre siempre no importa lo que digas serás mi mamá.

Finalizó con un puchero y solo eso... Y solo con eso me hizo reír, supe casi de inmediato que eso era lo que el quería lograr al ver su mirada satisfecha y detrás de mi la risa tranquila de mi esposo.

Phayu había llegado a mi vida en el momento más oscuro y la había alegrado de una manera que jamás imaginé podría hacerlo, no cuando la tragedia me había destruido completamente.

-Vamos a comer pizzas, me pagaron las primeras asesorías universitarias así que yo invito.

-Felicidades hijo, pero solo por eso te ganas que yo pagué todo... Eres nuestro orgullo Phayu.

Mis ojos estaban llenos de lágrimas mientras asentía a las palabras de mi esposo, acaricie suavemente su mejilla y con cuidado me gire para guardar nuevamente una de las pocas prendas que conservaba aún de mi bebé ante la mirada atenta de los dos hombres de mi vida.

-Bien, vamos por pizzas...

Al levantarme y como siempre deje un pequeña oración para que dónde quiera que estuviera mi bebé estuviera vivo, estuviera a salvo, feliz y que pudiera volver a mi...

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Abrir los ojos ya significaba un estrés para mí, no había un día que no me esforzara por ser lo que mi papá quería... Pero nunca nada era suficiente, me gradué con honores, no sé lo que es tener amigos o un novio o novia, no salía, no hablaba con nadie, solo vivía para mi papá quien me había dado todo.

-¿Aún estás acostado? Joder no entiendo porque tienes que ser así Rain... Me jodo toda la vida por ti, doy mi vida para ti ¿Así me pagas?

Mis ojos se llenaron de lágrimas ¿Porque? ¿Porque mi papá me odiaba? ¿Que hice mal? Me limpie las lágrimas y me levanté escuchando las quejas y empezando mi día.

Hacer la limpieza y la comida antes de ir a clases, trabajo de medio tiempo y hacer las labores del hogar... Todo en un ciclo interminable. El sonido de mi celular llamo mi atención y para mí sopresa era la confirmación de el traslado a la universidad de Thailandia.

Con una sonrisa me acerque a mi papá quien con su mano me señaló el piso a sus pies donde me arrodille enseñándole mi teléfono.

-Papá ya me confirmaron el traslado.

-Por fin haces algo bueno, ya es hora de volver a casa.

Sin más se levanto tirandome en el piso pero poco me importaba, mi papá me había sonreído y eso me tenía lleno de emoción, hoy era el mejor día, hoy recibí un poco de su aprobación y eso era más que suficiente para mí.

Quizás el viaje a Thailandia sería lo necesario para por fin poder conectarnos cómo padre e hijo... Quizás eso era lo necesario para que por fin me amara.

El día paso tranquilo y al llegar me dediqué a limpiar y lavar a mano la ropa de mi papá como a él le gustaba, y aún cuando no tuve otra sonrisa como la de esta mañana si recibí su aprobación al ver la ropa limpia como el quería.

-Rain hijo... Ven aquí.

Me senté arrodillado a sus pies en la posición correcta y espere en silencio sus órdenes.

-Iremos a vivir a Bangkok, mi antigua ciudad natal pero tengo que contarte algo antes y es el motivo también de tu nombre... Lluvia, eres la tristeza de mi vida... Así que escucha con atención...

Una hora y media después me dió permiso de levantarme e irme a la cama... Por primera vez no me importaba el dolor de las rodillas por estar en esa posición tanto tiempo, por esta vez entendí el odio que mi padre me tenía.

Esta vez me odie más que nunca, odie mi aspecto tan parecido a mi otro padre después de saber la verdad... Más que nunca admiraba a mi papá Gun... Nunca me separaría de su lado, dedicaría mi vida a compensarlo y si algún día me encontraba con mi otro padre... Le haría pagar cada lágrima de mi papá.

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¿Hola?

Jejeje... Estaban advertidos, está sera la versión oscura de mis historias así que preparen pañuelos, antorchas y cuchillos... Solo recuerden que si me matan a mi se quedan sin historia

🥺🥺✨✨✨

Les agradezco mucho mucho muchisisisisisisisisisimo sus muestras de apoyo y paciencia 🙏😭✨

Ustedes son un amor por soportarme 🥺🥺

¿Les gusto el capítulo?

Nos estamos leyendo ❤️