eternal love 𖦹 kookmin.

Capítulo 23

—¡Kook, Kook! ¡Ellos patearon, acaban de patearme! —exclamó Jimin emocionado mientras llamaba como loco al menor, Jungkook sonrió mientras se dejaba caer a su lado y ponía una de sus manos en el vientre de Jimin. Suspiró, esperando a que alguno de los bebés volviera a patear. Su sonrisa se extendió mucho más y soltó un quejido de gusto cuando sintió como la pancita de Jimin se volvía a mover.

—Hablaré con ellos un rato —dijo el castaño mientras dejaba de lado la toalla con la que se estaba secando el cabello. Se acomodó en aquella cama y recostó suavemente su cabeza por el vientre de Jimin.

La pancita del mayor comenzaba hacerse más notoria. Ahora había crecido un poco más que antes, pues ya llevaba casi cinco meses con aquellos bebés.

Jungkook no dejó caer su peso por completo, se acomodó de igual forma que Jimin también se acomodara mejor en la cama.

—Hola, bebés —comenzó hablando Jungkook con una suave y tranquila voz sobre el vientre de Jimin, ocasionándole cosquillas—. Al fin decidieron aparecer, ¿no? Pues estoy feliz de que ustedes también lo estén. Anhelo tanto tenerlos entre mis brazos, no importa qué sean, niños o niñas o como sea, les estaré esperando tan felizmente —paró unos segundos, aprovechando para dejar un beso en la panzita de su Jimin.

El mayor sonrió felizmente mientras acariciaba los largos y suaves cabellos de Jungkook.

—Los amo tanto, gracias por hacer que mi Jimin se quedara conmigo, porque si no fuera por ustedes, seguramente me seguiría odiando —siguió diciendo Jungkook bromeando y escuchó la risita de su mayor, golpeándolo levemente en el hombro y negando—. Descansen bien, sus papás los aman —terminó de hablar y dejó otro beso en aquella zona.

Se levantó cuidadosamente de la cama y se acomodó justo a lado de su Jimin. Este sonrió tímidamente mientras se recargaba en el pecho de Jungkook. El castaño rodeó su cintura y lo atrajo más a su cuerpo para dejar un suave beso en su frente.

—¿Sabes? Aunque no me hubiera embarazado, me hubiera quedado contigo —aclaró el mayor mientras entrelazaba una de sus manos con la de Jungkook.

—Eso lo sé, aunque de igual forma... No hubiera dejado que te fueras de nuevo —respondió Jungkook mientras dejaba que Jimin jugara con su mano.

—Por cierto, ¿has notado...

La puerta de la habitación se abrió lentamente y una cabellera negra se asomó por ahí, era Soobin.

—Papás, ¿puedo preguntarles algo? —habló desde la puerta de la habitación.

Jimin asintió rápidamente y Soobin se acercó hasta ellos y se sentó al pie de la cama. Estaba algo tímido y nervioso, y eso lo pudieron sentir ambos chicos frente a él.

—¿Cómo te das cuenta que te gusta alguien? —preguntó haciendo un leve puchero, esa pregunta tomó por sorpresa a ambos chicos.

Ellos ya sabían de que lo que posiblemente estaba pasando entre sus dos hermanos, pero no creían que alguno de ellos se iba a acercar a preguntar algo como eso.

—¿A qué te refieres exactamente? —preguntó Jungkook.

—Es que... El amigo de un primo de un compañero del mejor amigo de Yoongi... No, de Taehyung, cree estar enamorado de alguien, pero no está seguro de ello —dijo, sintiendo sus mejillas calientes al no saber si lo que dijo fue coherente.

La pareja rió, sabiendo perfectamente que se trataba de sus hermanos.

—Pues... creo que te das cuenta cuando simplemente tu corazón se siente cómodo estando con esa persona, ya sabes. Sientes que tus manos sudan, y aparte de sentir nervios por estar cerca de esa persona, también sientes un cálido sentimiento que te hace sentir cómodo —respondio Jimin.