† Tu sonrisa †

†

¿Te gusta mi amigo? - esa pregunta se podía leer de forma muy clara. Mientras Shoko se escondía detrás de su libreta yo era cuento aparte -.

Se preguntarán ¿Cómo es que llegaron a esa pregunta, si solo van menos de dies capítulos de esta historia? Fácil de responder y es solo un mal entendido.

Pero para eso tengo que regresar justo al día donde yo y mi hermana, (supuesta mente) saldríamos de compras.

Cuatro días antes del tragico momento.....

¡¡Apúrate que ya es hora de la salida!! - me apresuraba al mismos tiempo que sarandeaba mi cuerpo. Hitomi me recuerda mucho a mi mamá: siempre con energía -.

No entiendo que es tan importante - justo cuando salió el último de nuestros compañeros me tomé la libertad de hablar casi en susurro; pero algo es algo ¿O no? -.

Ella soltó un suspiro exagerado mientras movía su cabeza con desaprobación y mantenía sus manos en forma de jarra. En el instante en que me miro a los ojos empezó a jalonear me rumbo a los casilleros para cambiarnos las zapatillas.

Es que hoy viene mi hermano a recojer me y quiero presentarte lo - está bien esa ni me la esperaba. Pero antes de poder decir algo más me dejó justo en mi casillero y ella se fue al propio -.

«Esto se siente raro, nunca conocí a la familia de algún amigo. No es como si los hubiera tenido» - en cuanto termine mi momento de reflexión, volví a ser arrastrado -.

Rápido caracol, que Hitomate no va a estar esperándonos toda la tarde - ¿Hitomate? Que nombre tan raro. Fue lo primero que me cuestione después de lo que me dijo -.

Cada que nos acercamos más al portón puedo distinguir que alguien está de espaldas. Un momento, ¿Tiene una flor en la cabeza? Se me hace conocida pero ¿De dónde?.

«¡Pero que idiota soy! Es Hitohito, el amigo de Shoko. Con razón le encontré parecido con Hitomi» - quería darme un golpe en la cabeza, pero me vería como un loco -.

Pero antes de siquiera pensar un poco más en mi idiotes, algo o más bien alguien llamo mi atención. Un chico grande y rubio el cual trae el uniforme del colegio de mi hermana. Se miraba un poco intimidante. Digo no está demás esa descripción ¡¡Parecía como si el tipo viviese en el gimnasio!!.

Hitohito, Makoto! - grito Hitomi feliz de la vida, como si le hubiesen dado el regalo que siempre quiso para navidad. Pero nunca dejaba de arrastrarme -.

Hitomi, ¿Porque tardaste tanto en salir? - pregunto Hitohito, preocupado sería la mejor manera de describir su expresión: la parte donde inician las cejas está ligeramente fruncida acia arriba, sus labios en una línea semi recta -.

Lo lamento, es que mi amigo se tardó mucho en recojer sus cosas - explico mientras bajaba la mirada, un poco apenada. Y por fin su hermano pudo relajar su rostro y dedicarle una sonrisa; la más sincera y linda que e visto (aparte de la de mi madre) -.

Ya, está bien. Eso puede pasar muy seguido - le respondió tratando de aligerar el ambiente, es bastante cariñosa la forma en que se expresa - creo que será mejor que nos presentes a tu amigo o se nos hara tarde para ir al centro.

Un momento, ¿También van al centro?, Que coincidencia, estoy seguro que si Shoko trataría de invitarlos con nosotros. Claro fallando en el intento. Pero parece que es una costumbre sacarme de mis pensamientos, pues sentí un gentil toque en mi hombro izquierdo.

Al voltear me encontré con la persona de mis pensamientos. La mire escribir de forma apresurada mientras los demás discutían sobre nose que.

Mis amigos vendrán con nosotros - se leía con claridad cada una de las letras. Decir que no me sorprendo al menos un poco sería tremenda mentira. Nunca creí vivir lo suficiente como para convivir con los amigos de Shoko -.