— ¿Puedes repetirlo?
— Estás disfrutando esto ¿no?
— Siento que estoy soñando, Wends.
Llovía, y no sería de notar si no fuese porque era el tercer día sin pausas, algunos salones y espacios habían quedado ligeramente (muy) inundados y la directora consideró que era mejor adelantar el descanso de la semana en ese difícil clima.
Pero luego de tres días, la situación en el dormitorio que compartían Addams y Sinclair estaba lejos de ser cordial.
— Estás enferma Wends. -sentenció la rubia, se hallaba sentada en su propia cama, rodeada de varios de sus peluches favoritos.
Wednesday por su lado, se encontraba en la silla que solía usar para sus momentos de lectura, solo que en ese momento desistir de su tarea designada apremiaba más ya que sin ello sería imposible continuar.
— Es que no termino de entender -su rostro se encendió levemente mientras la apuntaba con un dedo acusador- ¿tú quieres que yo coquetee contigo?
— Lo necesito. -la rubia tragó saliva, Addams continuó hablando como una máquina que escupía respuestas- Mi historia a tomado un rumbo complicado en la trama y me he dado cuenta que me es ajeno todo lo relacionado al... contacto humano.
— Pero, ¿no me dijiste que tus padres son... cómo era la palabra? Aquejadoramente empalagosos al punto que pegarse un tiro era más reconfortante que tener que pasar más de un minuto con ellos. -rezó Enid con perfecta memoria- Entonces no entiendo que pinto yo en todo eso.
— Ese es el problema -resolvió- Los he evitado tanto... -hizo un esfuerzo por continuar, hubiera preferido morder la cola de una cascabel antes de seguir hablando- evitarlos le ha traído traición a mi propio sentido de escritor.
— Entonces, estás diciendo que tú eres incapaz de escribir una escena de romance. -Enid reflexionó un segundo y continuó- pero espera, tu novela no es sobre romance.
— Así es.
— ¿Entonces que tiene que ver todo esto?
— Mi investigadora se obsesiona con un monstruo, -Sinclair levantó una ceja empezando a sospechar a donde iría el resto de ese comentario- el monstruo es un ser antropomórfico que intenta seducirla para escapar de la investigadora.
— Y aquí es donde te repito que estás enferma y que yo debería dormir temprano.
La rubia se dispuso a meterse bajo sus frazadas pero se congeló al ver a Wednesday acercarse a ella de manera peligrosa, el brillo en la mirada, los puños cerrado, la boca en una mueca recta cual rigor mortis, cruzó la línea que separaba su habitación y se plantó frente a ella que solo mantenía sus manos sujetando a uno de sus peluches que estaba por ser despachado al rincón para darle más espacio en la cama.
— Qué necesitas.
— ¿Eh?
— Lo que necesites, solo pídelo.
— ¿Por qué haces todo esto? ¿Qué está pasando por tu cabeza Wednesday Addams? ¿Por qué te frustra tanto todo esto? ¿Piensas que todos tenemos que estar al nivel de obedecer tus exigencias? Porque si ese es el caso te juro q...
— Tres días -irrumpió la morena sin dejarla continuar- desde que empezó la lluvia llevo tres días atorada en la misma maldita página sin poder avanzar, si no lo resuelvo ahora siento que todo el esfuerzo con el que he logrado seguir hasta ahora... questo sarà un incubo.
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Trátame suavemente 🔞
RomanceUn pedido inusual, en una noche de lluvia. Alerta de contenido +18 Portada hecha por @Soul_Kday02