Trátame suavemente 🔞

Tormenta e instinto.

OFF: Un saludo especial a los que estuvieron preguntando si habría segunda parte. Gracias por leer <3

Advertencia de SMUT (contenido algo puerco pueh, eso dicen)

Es la primera vez que lo hago así que... el que tenga miedo a morir, que no nazca. Disculparán si no le sé a este tipo de contenido.

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Si fuera de la habitación el clima parecía un caos completo, poco se comparaba con el desastre que bordeaba a ambas chicas que se habían quedado por un segundo ensimismadas, puesto que el avance tan agresivo de Enid sobre Wednesday tenía  gran parte de culpa en la cercanía a su nuevo enlobamiento.

— Enid.  —la morena mantenía los ojos cerrados doblegada por el peso de la mencionada, una escena que solo servía para deshacer el poco razonamiento que la rubia logró juntar, tan miserable, tan ínfimo.

— Si necesitas que me detenga, dímelo. —susurró con voz casi ronca— por favor... detenme —casi parecía una súplica por no perder la razón nuevamente.

— Necesito saber —fue toda la respuesta de la morena que por fin decidió abrir los ojos, sus piernas se intentaron mover y rozaron peligrosamente la entrepierna de Enid— se que sabes...

— ¿Wends? —le costó ahogar ese último gemido— ¿A qué te refieres? 

— Te vi con Ajax la semana pasada, tras el invernadero. —un ligero rubor ajeno a la propia Wednesday Addams, atacó sin merced en sus mejillas y volvió a mover sus piernas tratando de liberarse—

—  Ah... basta —la rubía no podría aguantar un segundo más si ella insistía en moverse— Wends, para. 

— Esto, fue una mala idea. —susurró y con un último movimiento intentó safar una de sus piernas de la situación, un muy mal movimiento de su parte—

Un gruñido, que nacía de un ronroneo que peligrosamente empezó a resonar en la boca de la rubia alertó a Wednesday, si antes no era del todo consciente de sus acciones, ese sería su último error, puesto que buscó su mirada y lo notó.

Ojos amarillentos, pupilas dilatadas y ella a merced de su instinto. La presa.

La mente de la morena intentó ordenar nuevamente sus ideas para encontrar un medio de salir, al menos viva, de esta. Pero Enid se había convertido en un pequeño tropiezo en medio de este plan, dejada llevar por su instinto. 

Sintió como su lengua se deslizaba por el lóbulo de su oreja provocándole un gemido que la sorprendió ante el tacto, con ese primer movimiento pudo sentir como le soltó el agarre que tenía de sus manos, pero se sentía tan hipnotizada por ese repentino control que había mostrado, que fue incapaz de intentar algún movimiento adicional.

Enid se acomodó un poco más casi sentada encima de ella, con una de sus manos la sujetó del cuello, sus garras ya se hallaban extendidas por lo que el primer movimiento fue arañarla ligeramente, un dolor que empezaba a convertirse en el placer preferido de Addams, que volvió a gemir con los ojos casi cerrados para maximizar esa sensación.

Queria que le desgarrara la garganta, y se sentía dispuesta a morir por ello.

— Enid —murmuró perdida en un éxtasis extraño.

Al sonido de su voz la rubia simplemente se inclinó lo suficiente y deslizando su mano por su barbilla la movió a un lado permitiendo disfrutar de la extension de su piel libre y pálida.

Suya.

El primer bocado que probó de su cuello  solo la encendió más, podía sentir sus colmillos clavarse lo suficiente para dejar una marca que se enrojeció al instante pero necesitaba más, se deslizo un poco hacia su hombro y volvió a dejar una marca pero esta vez con menos fuerza que la anterior, sus garras palpaban la vena en su cuello y eso le hizo lanzar un segundo gruñido.

La morena bajó una de sus manos por instinto y necesidad tomando la cabellera de la rubia pidiéndole en un silencio tortuoso hacer presión sobre su piel orden que fue acatada sin temor marcando una tercera vez a la altura de uno de sus senos, un sonido ahogado emergió de la boca de Wednesday, ella también estaba empezando a perder el control.

Dejó de sujetar su barbilla para liberarla de la blusa de un solo tajo, lo que le permitió bajar a hacia sus senos que masajeo con firmeza presionando y soltando, su lengua ahora concentrada en el lado derecho de su pecho que se enroscaba sin piedad en la punta de este arrancando más suspiros de placer, se sentía vacilante por un segundo en continuar pero parecía que Wednesday leía su mente. 

— Más... -alcanzó a decir antes de continuar con la respiración igual de agitada.

La rubia le dio un ligero mordisco al centro de su pezón y lo jaló con cuidado enrojeciéndolo, eso dolería al día siguiente pero poco le importaba, se sentía perdida en ese aroma que la envolvía y no terminaría hasta no haber probado cada pedazo de su piel.

Se volvió a levantar para admirar su obra mientras Wednesday recobraba el aliento, recuperó el control del cuerpo de la morena al bajar con sus manos hasta su torso dejando que sus pulgares bacilaran sobre su vientre hasta el borde de sus caderas, que con un movimiento firme la embistió y esto provocó una nueva oleada de placer, necesitaba poseerla.

Con sus garras arrancó el botón de sus pantallones y fue desahaciendose de las prendas que le estorbaban incluyendo las suyas, ahora todo tipo de prenda que le impedía sentir el contacto de la morena le molestaba, le picaba, ya no era más ese fastidio que tenía de tenerla cerca.

Enid descubrió que lo que la alteraba de ella era la necesidad que tenía de hacerla suya , y con este último pensamiento sus manos terminaron de alejar los últimos retazos de ropa que la tenían apartada de este deseo.

En un movimiento algo brusco y tomándola por la cintura la colocó sobre ella, al hacerlo pudo sentir la humedad resbalando por sus piernas que temblaron ligeramente por la nueva posición en la que se encontraba, perdida ante esa nueva sensación Enid dejó que una de sus manos se perdiese bajando por su vientre y directo hacia el centro de la morena, el líquido resbaló entre sus dedos y Wednesday se curvó un poco hacia adelante apoyandose sobre la cama mientras palabras inentiligibles resbalaban de su boca. 

La rubia dejó que sus dedos juguetearan en su entrada, provocando más oleadas de placer que parecían ya ser incapaces de controlar, presionó y dejó que sus dedos entraran despacio en ella mientras mantenía un vaivén rítmico sobre sus caderas, hasta que la morena finalmente arqueando la espalda solo atinó a presionar el cuello de la rubia mientras sentía el orgasmo explotar desde su vientre hasta su boca con un gemido alargado e intenso, finalmente pudo sentir su cuerpo relajarse sobre ella. 

Pero Enid apenas estaba empezando.

OFF: 

Y bueno, continuarlo o no, jajajaja ¿qué dicen? 

PD: Gracias a dream-wenclair por darle la leída previa :D