SIN IMPORTAR LO QUE ME PASE- seiya x saori (saint seiya omega)

RESCATE PARTE UNO

Sufrimiento, dolor, angustia, desesperanza ,todas esas emociones me consumen. Puedo sentirlo, me comen desde el fondo de mi alma.

Sin poder hacer nada, encadenado, solo y asustado. Sabiendo que al final, tal vez nadie venga por mí, porque, ya no soy caballero, no tengo Cosmos, no soy nadie. ¿Alguien puede explicarme qué fue lo que hice mal? ¿Fui un terrible pecador, en mi vida pasada?¿Cometí algún crimen imperdonable para tener que pagarlo tan caro?, no lo sé. Mis esperanzas se queman a medida que avanzan las horas. Las largas horas...

El hecho de morir ya no es importante para mí en absoluto.

Siendo sincero, sería una salvación...

Saori, mi amada Saori ¿dónde estás?

...

Jeje.

¿Quién lo diría? Antes tú eras la bella princesa que rescataba yo, el valiente caballero, era cómo un cuento de hadas. Vaya giro de roles ¿No crees?

"Y la hermosa princesa y el príncipe azul vivieron felices para siempre" . Tonto, altamente estúpido en mi situación. La situación que es peor que arder en el infierno, es mi realidad. Nix está obsesionada conmigo, me quiso violar, de hecho...ya lo hizo.

Solo puedo pensar en ti, mi amada Saori... Solo puedo imaginarme que estás de nuevo a mi lado y salto a tus brazos, lleno de alegría, por verte de nuevo junto a mí.

...

Pero temo que mi corazón dejará de latir en cualquier momento, sofocado por el dolor físico y mental al que esa diosa me somete, todos los días...

¿Cuántos días han pasado ya? Tal vez cinco...o cuatro...mi noción del tiempo es confusa.

Tema, sólo lo tengo a él. Es el único que me da las esperanzas de que vas a venir a buscarme y rescatarme. De no tenerlo a él...me hubiera suicidado hace tiempo. Sin sus ardientes palabras, hubiera elegido reunirme con mis padres a seguir con una falsa esperanza que yo mismo me sigo obligando a creer.

Si sigo aquí más tiempo...ni mil palabras de ánimo que me diga Temma me va a impedir despedirme de todo. Estoy completamente seguro de eso, tarde o temprano terminaré con mi ahora, miserable vida.

S-Saori...por favor...ven y ayúdame.

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Saori y los demás ya llevaban un día en Mil almas malditas. Estaban comiendo un búfalo que habían cazado, para cenar ya que se hacía de noche.

El número de perlas aumentaba más y más conforme se acercaban a la enorme fortaleza. La diosa Hera las cuidaba como si de un hijo propio se tratara. Aquellas bellas y grandes perlas que, al llegar al olimpo las dejaría en La Fuente de las Benditas. Una fuente, cuyas aguas cristalinas es capaz de limpiar el alma de cualquiera que esté consumido por el rencor hacia otra persona. En esas aguas las almas de los Desafortunados, por fin descansarían en paz.

Saori por otra parte, podía sentir algo, un sentimiento de desesperanza extrema. Cuya fuente era una energía muy limpia/ pura. Ella no podía comprender por qué esa energía, tenía tal sentimiento tan horrible.

_¿Seiya? .-se dijo a sí misma en un susurro-.¿E-Eres tú acaso esa energía que sufre...tanto?

Si algo sabía la diosa del chico, era que después de madurar era una persona muy pura y amable. ¿Seiya con desesperanza? Era algo que ella se negaba a creer. Él era siempre el que sacaba la esperanza de donde no había y con su valiente corazón, daba todo de sí para ganar la batalla, sin importar la fuerza del enemigo, digno de admirar.