The great captain and elder brother

6.

El sol estaba en su punto más alto cuando la tripulación salió de la cabaña en compañía de su capitán y hermanos despidiéndose de Dadan y los demás.

Iban nerviosos al igual que los menores.

Siguiendo a su capitán se dirigieron a un bosque bastante apartado del pueblo.

El bosque era demasiado frondoso, tanto que apenas entraba la luz solar entre las hojas, el viento movía las ramas y la tranquilidad del lugar era muy relajante.

Luffy se detuvo y les dijo que esperaran mientras que el avanzo unos pasos solo, una sonrisa apareció en sus labios, realmente había extrañado aquel lugar.

Cerrando sus ojos llevo sus manos juntas a sus labios y soplo.

Un dulce y fuerte silbido se escuchó con un gran eco debido a los árboles. El sonido era exactamente a una ocarina, la tripulación se sorprendió al verlo provocar ese sonido tan dulce y relajante.

Desde el fondo del bosque se empezaron a escuchar pisadas con bastante rapidez junto a gritos que se asemejaban de felicidad y emoción provocando que Luffy dejara de provocar aquel sonido. La tripulación se puso en guardia, excepto Luffy y sus hermanos, quienes mostraban una emoción gigante, al ver a su capitán se relajaron.

Sombras empezaron a aparecer entre los troncos de aquellos inmensos arboles dejando ver a personas de distintas edades, razas y alturas pero que resaltaba era una marca de dos líneas rojas en la mejilla izquierda. A medida que se asomaban la felicidad y emoción se hizo presente.

Pequeñas lágrimas se asomaban en aquellos ojos emocionados mientras que otros aun no salían del gran shock que estaban presenciando.

-¡El jefe ha vuelto! –Grito un hombre mientras lagrimas bajaban por sus mejillas.

Todas aquellas personas empezaron a correr gritando de emoción hacia donde estaba Luffy con una mirada llena de amor y nostalgia, su gran sonrisa D se formó en su rostro.

-¡Hola chicos! ¿Han estado bien? –Dijo Luffy mientras observaba a su alrededor con una grande sonrisa.

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Al llegar a la aldea una multitud se abalanzó sobre el capitán, lágrimas, risas y grandes abrazos se hicieron llegar, la tripulación también fue parte de esto. 

El capitán saludo con gran emoción presentando a sus nakamas, asombro y admiración se denotaba en las miradas de los espectadores. Halagos se dirigieron sobre la tripulación dejándolos sin palabras y con un pequeño rubor.

Entre toda la multitud se empezó a abrir un camino y un silencio lo seguía, los recién llegados miraron hacia el camino con duda mientras el capitán se sacaba su sombrero y lo dejaba colgado hacia atrás.

Un anciano con una gran barba blanca y cabello blanco atado a una coleta baja se acercaba con lentitud con ayuda de un bastón quedando frente al capitán quien era unos centímetros más alto.

El anciano hizo una leve reverencia dejando su mano derecha sobre su corazón hacia el capitán.

-C'estun honneur de vous revoir, patron, nous attendions votre retour avec impatience–Dice el anciano con suavidad. 

(Es un honor tenerlo de vuelta jefe, hemos esperado con ansias y anhelo su regreso.)

La tripulación miro con duda a su capitán sin entender nada pero Robin sonrió con emoción al escuchar el idioma.