8.

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Algo estaba pasando.

Luffy lo sabía y estaba seguro que sus hermanos también lo notaban.

Hace días que nota algo en la aldea, específicamente en unas personas que se habían aislado de los demás.

Luffy trato de hablar con ellos pero desaparecían y sus presencias se sentían alejadas de la aldea.

Siempre había sospechado de ellos pero no quería hacer un gran problema, ni alarmar a los demás entonces solo se lo comentó a Omi y días antes de irse a sus hermanos.

Aquel presentimiento no se iba de Luffy, su cuerpo le estaba avisando de algo pero no podía saber qué. Su sentido se alerta estaba más atento que nunca.

La noche estaba haciendo presencia y Luffy se quedó mirando como el sol se escondía dando paso a la noche, pero esta vez sin luna.

Los menores vieron a su hermano y se acercaron.

-También lo sientes, ¿Verdad Nii-san? -Dice Sabo mirando a su hermano.

Un asentimiento fue observado.

-En algún momento esa campana va a sonar, ¿Saben lo que significa, cierto? -Expresa Luffy con seriedad.

-Lo sabemos Nii-san-Responde Ace de la misma manera.

-Sé que en mi ausencia algo pasó que ustedes no me han dicho pero que se hicieron cargo y eso se los agradezco -Dice Luffy mirando a los menores.

La seriedad se apoderó de sus rostros y asintieron a las palabras de su hermano.

-Si sucede algo no se preocupen -Dice Luffy- Yo me haré cargo de lo que sucederá pero necesitaré que estén atentos y protejan a los demás -Pide con suavidad acariciando las cabezas de los menores.

Aquella caricia calma un poco los nervios de los menores, sentir la presencia de su hermano les dejaba una paz en sus cuerpos.

Esa caricia se convirtió en un abrazo, a pesar de que el malestar no se alejaba del cuerpo de Luffy, el solo sentir a sus hermanos le daba tranquilidad.

El llamado de Sanji a cenar los hizo separarse y las manos del mayor fueron apresadas por las de los menores causando una pequeña risa en Luffy y de esa manera emprenden camino a la casa.

La cena fue tranquila, llena de conversaciones que no tenían fin, el cuerpo de Luffy se relajó un poco y se dedicó a disfrutar aquel momento.

Aunque Luffy podía sentir las miradas de algunos de los presentes decidió ignorarlas y seguir comiendo con ganas.

La comida terminó con tranquilidad llegando la hora de dormir, se distribuyeron como siempre.

En las habitaciones del segundo piso se encontraban Ace, Sabo, Franky y Brook y en la otra estaba Nami, Usopp, Chopper y Robin mientras que en la del primer piso estaba Jinbe, Brook, Law, Zoro, Sanji y Luffy.

Las luces se apagaron dejando la casa en silencio, uno bastante pesado.

El capitán soltó un suspiro y se propuso dormir, cerrando sus ojos se dejó llevar por el silencio quedándose dormido.

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Algo despertó a Luffy en la madrugada, quien abrió sus ojos con pesadez sentándose en la cama frotando sus brazos entumecidos debido a la posición en que dormía, miró a los que estaban en la habitación durmiendo con tranquilidad y que deseaba que siguiera así.

Se recostó de nuevo para seguir durmiendo.

Entonces aquello se escuchó.

Fuertes sonidos de una campana hacían vibrar la casa, sonidos ensordecedores que causaban temblores a cualquiera que los escuchara.

The great captain and elder brotherDonde viven las historias. Descúbrelo ahora