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Haerin odiaba a Minji, su vecina. No la soportaba y no podía ni verla, pero desgraciadamente tenía una fuerte fijación en Danielle, la hermana de Minji, y las cosas empezaron a volverse complicadas.

Kang Haerin, también conocida como Haerin, era una chica de 17 años, alta, guapa, de pelo naranja, con un potencial enorme y dispuesta a comerse el mundo. Era el prototipo de chica perfecta, la tipica novia que quieren todas las madres para sus hijos o hijas, pero a Haerin solo le gustaba una persona, su vecina Danielle. Desde el primer momento que la vio en el jardín ayudando a su madre con las plantas se quedó estupefacta. Era guapísima, tenía una sonrisa preciosa y un porte increíble. En esos momentos tuvo un crush gigantesco, el problema llegó cuando, en medio de aquella embobación de Haerin hacia Danielle, sintió una piedrecita tocar su ventana.

Haerin desvió su atención hacia abajo para encontrarse a otra persona que sonreía burlonamente, y le vocalizaba:

"¿Qué miras tanto?"

Haerin rodó los ojos y cerró la cortina. Esa fue su primera toma de contacto con Kim Minji.

Minji era una chica digamos... interesante. Bastante pícara, no tenía pelos en la lengua para decir las cosas de frente. Quizá un poco torpe, bastante diría yo, pero con muy buen fondo. Más que bueno.

Minji también era bastante llamativa. Pelinegra de 18 años, con unas facciones de porcelana, una sonrisa que ablandaba a cualquiera y unos ojos que te hipnotizaban. Sus padres siempre decían que parecía un oso cachorro. Aun así, su personalidad no se asemejaba tanto a aquello. Al igual que Haerin cayó flechada de Danielle, Minji lo hizo de Haerin.

Minji no era de enamorarse fácilmente, sí que es cierto que tenía a muchísimas chicas detrás de ella, incluso algun chico, y que cuando salía de fiesta siempre ligaba, pero nunca sintió cosas más allá de eso. Hasta que vio a Haerin asomada en aquella ventana, con su cabello naranja suelto y aquella camisa de seda blanca, Minji recordó hasta la última vestimenta del outfit durante estos 6 meses.

El problema de todo esto es que Minji es una chica avispada y supo en ese momento que Haerin miraba a su hermana, y también reconoció aquella cara de enamorada a metros de distancia. No era la primera vez que pasaba, quiero decir, Minji era preciosa pero su hermana Danielle también. Digamos que la familia en general era bastante agraciada.

Hubo una ocasión hará unos tres años que a Minji le empezó a interesar una chica de clases, fue la primera vez que le ocurrió, pero poco después se enteró que a esta chica le gustaba su hermana. No pudo hacer nada, no es ese tipo de persona que insiste en algo si sabe que no va a ningún lado, pero supongo que debía a acostumbrarse.

Minji empezó a intentar llamar la atención de Haerin a lo largo de estos meses pero de manera peculiar. No era exactamente como estáis pensando ya que Minji era un poco... como dije antes, torpe, pero a la pelinegra le bastaba para tenerla cerca aunque a Haerin le creciera más y más su odio.

*Flashback*

— ¡Dios! ¡Joder! ¡No la soporto!— gritó Haerin entrando a su habitación y dejando el bolso de golpe sobre la cama. Hanni la seguía detrás.

— ¿Te quieres tranquilizar? A mi me ha parecido muy mono— dijo riéndose.

— ¡¿Muy mono?!— dijo señalando su camiseta.— ¡¿Te parece mono que me tire la tierra de la maceta encima?! ¡Y encima delante de Danielle! ¡Ufffffff!

— Pero era con buena intención Haerin, ella solo quería enseñarte las flores que había plantado— dijo riéndose.

— Flores su madre.

Deal - MinrinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora