Singto vive enamorado de un guapo chico llamado Krist, del cual solo sabe su nombre y que por alguna razón casi siempre suele vestir con alguna prenda naranja.
Un día se le olvida uno de sus jerseys en la cafetería de la Universidad y entonces el mo...
Singto tenía un enorme cacao en la cabeza pues Krist le gustaba cada vez más pues desde que se habían acercado, no solo le parecía guapo e interesante, sino que además lo veía tremendamente sexy.
Con cada roce y caricia de este, el moreno veía las estrellas y por ello le encantaban las clases de baile, sobre todo cuando la monitora les mandaba perder la verguenza y la timidez y dejarse llevar.
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Las palabras de Tay retumbaban en su cabeza una y otra vez y aunque intentaba no hacerles caso y que no le afectasen, la verdad era que cada vez que los chicos y chicas de la clase de baile, le sonreían o tocaban a Krist, algo dentro de él le decía querer apartarles a puñetazos.
El colmo fue cuando a Pam se le ocurrió que sus alumnos fuesen rotando de pareja para la clase de esa tarde y aunque al principio estuvieron incómodos, el moreno tuvo la sensación de que Krist parecía estar encantado.
Incluso el chico con el que le había tocado bailar al moreno, se dio cuenta de lo mal que se estaba sintiendo este pues no se concentraba en el baile y no paró de seguir con la mirada a Krist, llenándolo de pisotones.
Aunque lo que este no vio, fue que para Krist tampoco fue fácil ni de buen gusto, verle reírse y disfrutar con los otros chicos en algunos momentos en lo que este lo hizo.
Al terminar las clases, los celos estaban ahí, entonces el moreno intentó disfrazarlos de queja contra lo mal que se le daba el baile y el más joven lo hizo siendo muy seco e irascible con él.
Esta vez ya no hubo un beso en la mejilla, ni «gracias por esto», ni un «nos vemos luego», por parte de Krist al despedirse, esa vez, este simplemente echó a correr hasta su edificio, dejando al mayor muy desconcertado y sin saber que hacer.
Cuando Krist llegó a su habitación, realmente furioso se metió en la ducha y tras secarse y ponerse un pijama, se tumbó en su cama y se echó a llorar como un niño.
Singto por su parte, se duchó, se cambió de ropa, luego cogió su cámara y salió fuera, donde se encontró con Tom y Mike, quiénes llevaban un rato compartiendo risas, mientras charlaban.
...-Hey, oye no pareces muy contento, ¿La clase de baile de hoy no estuvo bien?
-Pues no sé que decirte, la verdad-contestó este cabizbajo-... Krist está molesto conmigo y no sé que demonios he hecho... Salimos de clase y se ha largado sin decirme nada.
-Tranquilo, seguro que está extresado con los exámenes -Habló Mike-... cuando me vaya a la habitación indagaré.
-Bueno, lo cierto es que a veces metemos la pata y no nos damos cuenta y nuestras parejas disfrutan haciéndonos sufrir hasta que lo descubrimos.. Quieren que pensemos en lo que hemos hecho, recapacitemos y luego le pidamos perdón.... Tarde o temprano te dirá que le pasa, confía en mí.-habló Tom posando su mano en el hombro de su amigo, en señal de apoyo.
-Pero no somos pareja, somos amigos y me apunté a clases de baile por él, no entiendo que ha ocurrido.
-Anda no le des más vueltas-Habló nuevamente Mike- se le pasará
Singto suspiró con pesar y a continuación siguió su camino.
-Ok, eso espero
Tras eso, Sam estuvo intentando localizar a su amigo pero no hubo manera pues habían quedado en la cafetería y tenía algo importante que decirle.
Tras cansarse de esperar, este fue al edificio y tras intentar entrar a la habitación sin éxito pues estaba arrancado, Krist lloroso y abatido le abrió no de muy buena gana.
...-Hey, ¿Se puede saber qué te pasa?, llevo una hora esperándote en la cafetería, ¿Por qué no has ido allí después de las clases de baile como siempre?
Este cerró la puerta después de que entró, mientras vio que su amigo se volvía a tumbar en la cama.
-Oye, cuéntame, ¿qué es lo que te pasa?, ¿Acaso te encuentras mal?, ¿Vamos a la enfermería?-habló preocupado
-No me pasa nada, es solo que estoy cansado- respondió Krist pasivamente.
-Si claro y entonces esa cara larga de disgusto y esos ojos hinchados, ¿qué significan?
Este resopló con pesar.
-No es nada, simplemente que la clase de baile de hoy, no me ha gustado, solo eso.
-¿Ha pasado algo malo?
-No, nada....S-Sólo que hoy apenas hemos estado juntos Singto y yo y bueno él se apuntó conmigo a las clases pero parece disfrutar mucho sin mi.
Sam arqueó las cejas y se acercó a la cama de este.
-¿Qué ha ocurrido, Krist?
Esye soltó un profundo suspiro y a continuación se tapó la cara con su almohada.
-Oye, dímelo, quizás te sientas mejor y además yo te podré dar mi opinión
-Déjalo, da igual.... Además es una tontería, no tiene ninguna importancia, ¿Puedes irte?, quiero estar solo- Dijo este finalmente, levantándose de la cama y metiéndose en el baño.
-¿Qué mosca le ha picado?-se preguntó Sam desconcertado y saliendo de allí.
Minutos después, Krist salió y tras cambiarse de ropa de nuevo, decidió salir a pasear y despejarse pues todavía era pronto para cenar o irse a la cama donde daría vueltas y más vueltas.
Mientras caminó, este pensó en todo lo ocurrido y sin darse cuenta una vez más llegó al edificio de Singto dónde este hacía fotos para variar pero estaba tan molesto con él, que esa vez no se sentó en la piedra a disfrutarlo, sino que pasó de largo y siguió caminando por los alrededores del campus universitario.
