-[Capítulo 4]-

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*Ruido*

Habían pasado varios minutos en silencio incómodo desde que habíamos escapado de la escuela, sin tener un rumbo fijo, pero la enfermera Marikawa seguía conduciendo sin importarle nada mientra yo estaba a su lado apollado una pared viendo el panorama mientras atrás empezaban a hablar intensamente, y solo por curiosidad moví mi ojos hacia atrás con lentitud.

¡Parece que lo logramos! Hablo Takashi hacia nadie en particular, pero Hirano le respondió con un asentimiento y un si con la cabeza en buena onda.

*Paso*

*Paso*

*Paso*

¡Gracias por salvarnos! hablo el profesor Shido camiando desde atrás del autobús hacia Saeko parando a preguntarle con una mirada codiciosa, oculta por su sonrisa de profesor amable.

Apoyando su mano en el asiento de Saeko amigablemente con un sonrisa que amenazaba con partirle la cara.

¿Eres la líder, Busujima-San? Preguntó el profesor en un tono curioso.

No tenemos lider. Nuestra supervivencia se debe sólo a nuestro trabaja en equipo. Respondió Saeko tranquilamente mientras con un pañuelo limpiaba su katana de madera delicadamente como si fuera una diamante que con el más mínimo contacto se rompería.

¡Oh! ¡Pues, eso no es bueno! Necesitamos un líder para poder sobrevivir. Hablo Shido agudizando su mirada hacia Saeko.

Mirándola con mas intensidad prosiguió hablando;

¡Uno que lo maneje todo!

Esto habia puesto al grupo de Takashi en alerta, y más a cierta pelicastaña quien miraba con intensidad al supuesto profesor amable.

Te vas ha repentir de esto. Hablo Rei girando su mirada de Shido hacia atrás a mí, quien estaba apoyado contra la pared del pasillo que llevaba a la cabina del conductor.

Yo solo mire a Rei con una mirada neutra, no sintiendo simpatía por el desagrado de Rei por su profesor Shido.

Pero tenía razón, ese profesor Shido solo quiere tomar el poder, ganándose los corazones asustados de los alumnos, con palabras reconfortantes, ¡Pero! Sabía que sólo quiere aprovecharse del mando para su propio beneficio enfermo y retorcido.

Entrecerro mis ojos hacia Shido de una manera peligrosa analizando cada uno de sus movimientos.

Este mundo ya se habia hido por el caño, ya no habia nada que manteniera el orden en la sociedad. Así que este sujetó, Shido no me daba buena espina.

¡Nuestra Ciudad! Gritó el gordito buena onda de gafas viendo a través del vidrio de la ventanas del autobús, con una mirada de incredulidad.

Llamando la atención de todos, voltearon a ver la ciudad desde una colina, viendo edificios con nubes negras que se extendían a kilómetros de distancia.

Pasando por varios lugares, vieron todos consternados como habían autos incendiados, locales con vidrios rotos símbolo de vandalismo a la propiedad, junto a cadáveres andantes y quemados por las intensas llamas producidas por alguna explosión.

Conduciendo más alejados de la escuela, el autobús se sacudió como si hubiera atropellado algo luego de una curva pasando por un local donde un hombre sentado veía a la nada con una mirada perdida.

*Ruido*

¡Miren! ¡Nunca lo lograremos si seguimos avanzando! Hablo un hombre PeliRubio de la parte superior y de su color natural para abajo peinado hacia atrás, con el Uniforme de la Escuela y un pirsing en su oreja Izquierda desde atrás del autobús parado hablando con enojó en su voz.

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⏰ Última actualización: Mar 26, 2023 ⏰

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