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—es ridículo, la nueva profesora de artes me colocó una mala calificación —dijo daehyun mientras apoyaba su cabeza en el pupitre de maria.


—¿por qué? ¿qué tarea te dió?


—bueno, dijo que teníamos que dibujar un animal que nos representara.


—¿qué dibujaste? —preguntó chanhee dejando su celular de lado unos segundos y colocando toda su atención en daehyun.


—es que al principio quería dibujar un gato, pero luego me dije que quizás un pájaro sería una buena idea, aunque también me gustan los perros —respondió mostrando su tarea —no entiendo la razón de ponerle una mala calificación a esta obra de arte, creo que la nueva profesora y yo no nos llevaremos tan bien —suspiró con cansancio.


maria se tapó la boca intentando no reír para no lastimar los sentimientos de daehyun, pero chanhee no se pudo contener tanto y terminó soltando una pequeña carcajada que por suerte pasó desapercibida para el pelinegro.


maria no lograba comprenderlo del todo, anteriormente había visto a daehyun dibujar diseños de ropa y lo hacía bastante bien, incluso tenía un cuaderno lleno de dibujos con modelos diferentes ¿por qué esta vez le costó tanto hacer un simple animal?


el pequeño receso había terminado y daehyun tenía que regresar a su salón de clases. como su popularidad era enorme siempre tenía a chicas siguiéndolo a sus espaldas, recordó que la primera vez que las vió haciendo eso se asustó demasiado, pero viendo que solo se quedaban a una distancia considerable lo dejó pasar, eran como una especie de guardaespaldas. agradeció que no lo siguieran después de clases porque de ser así ya les habría puesto una denuncia.


mientras caminaba por los pasillos sintió una mirada muy profunda sobre él, como si lo quisieran ver mil metros bajo tierra, giró su cabeza en aquella dirección solo para encontrarse a un chico de cabello color anaranjado. daehyun lo único que hizo fue levantar su mano y saludarlo, pero el chico al ser descubierto se escondió rápidamente detrás de la pared del pasillo por donde se asomaba.


—que tipo más raro —susurró daehyun.


al entrar al salón de clases su vista rápidamente reparó en jay. el chico no ocupaba sus lentes y su cara aún seguía magullada por la pelea del otro día. a pesar del trato que recibió por parte del chico aquel día lo único que quería en ese instante era estar con él o conversar al menos unos minutos, no estaba pidiendo demasiado ¿o sí?


no entendía muy bien sus propios sentimientos, pero estaba totalmente embobado por jay.


como siempre el profesor de historia había dejado tarea. esa misma tarde cuando llegó a casa decidió que haría todos los trabajos que le habían pedido, pero al final se había quedado dormido en su escritorio con todos sus cuadernos desparramados por la mesa. cuando despertó al día siguiente su espalda y cuello dolían, se estiró haciendo que sus huesos sonaran.


revisó la hora en su celular, aún quedaba una hora para el inicio de clases, algo que llamó su atención fue que tenía un mensaje de la hija de uno de los amigos y socios de su padre, quería que salieran a tomar café un fin de semana y para ser sincero no quería salir, pero si la rechazaba también ponía en riesgo los negocios de la familia, así que no tuvo otra alternativa más que aceptar.


llegado el fin de semana se tuvo que preparar para salir, si bien no quería ir tampoco iba a asistir mal vestido. tuvo que darle la dirección al chófer de la familia para que lo llevara, cuando llegaron a unas cuantas cuadras del café rápidamente se bajó y se despidió del chófer haciéndole saber que luego lo llamaría para que lo fuera a recoger.


𝙁𝘼𝙉𝘾𝙔 ── wind breaker Donde viven las historias. Descúbrelo ahora