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Los flechazos entre hermanos existen? Existen, sobre todo cuando se separan por mucho tiempo como le pasó a Takara y su hermano.
Takara llegaba de la escuela entusiasmada ya que su hermano días atrás había regresado a casa, anteriormente a ella le gustaba salir con sus amigas pero desde que llegó el, prefiere quedarse en casa, lo admira, lo ama, el es su todo, su diferencia de edad era de 4 años , el se había ido a estudiar a otra ciudad por algún tiempo, ella lo había extrañado pero al fin lo tenía de nuevo cerca.
Takara se sentía extraña cuando lo vio nuevamente después de tanto tiempo, tan cambiado, tan maduro.
Mariposas en el estómago crecían en ella, se podía decir que, por momentos eran sensaciones que se catalogan prohibidas, Takara deseaba llenarlo de besos, abrazarlo y ... Cuando llegaba a ese punto de sus pensamientos prefería frenar.
Para su hermano regresar a casa fue algo extraño, ver nuevamente a su hermana Takara causó una sensación extraña, ella había cambiado tanto, se veía tan hermosa, tan linda, tan... Sensual.
Takara era tan hermosa que no podía compararse con alguna mujer que el haya conocido y desde su regreso al verse nuevamente su corazón se había acelerado.
Desde entonces los dos cuando platicaban de alguna cosa sentían que sus corazones palpitan fuertemente, sus miradas eran intensas, sonrisas cómplices se hacían presente, sensaciones prohibidas que crecían entre los dos.
Una noche cuando ella había llegado de la escuela y se encontraba en su habitación, había comenzado a verse en el espejo, pintaba sus labios de un rojo pasión, se miraba fijamente y se preguntaba que clase de mujeres le gustaban a su hermano?
De repente ella escuchó el sonido de la puerta de su habitación, por el reflejo del espejo observó a su hermano entrar, ella sonrió y lo miró fijamente a través del espejo, nuevamente el sonido de la puerta de su habitación se escuchó cerrandose.
Los pasos de su hermano se escuchaban, se acercaba mientras Takara solo se limitaba a observar a través del espejo, luego ella sintió sus manos colocarse en su cintura, su hermano comenzaba a abrazarla desde atrás, en seguida ella sintió que hacía su cabello a un lado, su hermano comenzaba a hundir su rostro en su cuello. Takara suspiró ante aquel contacto
-Eres tan hermosa- escuchó susurrar a su hermano y en seguida ella cerró sus ojos al sentír como el comenzaba a besar su cuello, besos sutiles, suaves e intensos al tiempo, Takara sentía mil y un sensaciones, su corazón estaba acelerado, las manos de su hermano comenzaron a entrar bajo la blusa blanca de su uniforme, que piel tan suave tenía Takara decía el entre sus pensamientos, muy suave y calida que sus manos la acariciaban sutilmente sintiendo su piel arder entre sus manos.
El aroma de su hermana era exquisito, no paraba de besar su cuello, Takara era adictiva, sus manos la estrechaban un poco más para sentirla más apegada a el, acariciaba su abdomen, y las sensaciones que tenía el aumentaban. Una erección se hizo presente en el y Takara sintió lo que estaba ocurriendo en ese instante, su hermano se había excitado con ella, Takara comenzó a sentír su respiración acelerarse, su hermano la deseaba, era un sueño lo que estaba pasando, no podía creerlo, Takara no podía resistir más, se soltó de su hermano y se giró frente a el, lo miró fijamente, sus miradas chocaron entre sí, no había más dudas, ella quería desatar sus deseos y sin más ella lo tomó del rostro y comenzó a besarlo, su hermano estaba sorprendido, los besos de su hermana eran exquisitos, suaves, y lo adictivo del sabor de su labial lo enloquecían. El hermano de Takara nuevamente la abrazó de la cintura mientras estaban besándose, el momento se hacia más intenso, el por momentos mordisqueaba los labios de ella, tan exquisitos, tan adictivos, el quería más, y sus manos bajaron hasta la falda de su hermana, se introdujeron y comenzo a acariciarle las piernas, era una sensación excitante, sobre todo sentir sus piernas entre aquellas medias oscuras, era realmente algo exquisito. Takara sintió su ropa interior empaparse, suspiró al momento que su hermano la acariciaba, sus manos recorrían sus muslos, ella temblaba ante aquellas sensaciones prohibidas y causaron en ella un leve gemido. Takara subió una de sus piernas al rededor de la cintura de su hermano, dándole acceso que la tocase más, una de las manos de el subió, se introdujo más al fondo logrando tocarle los glúteos a Takara. Ella estaba bastante húmeda, pequeñas gotas de su dulce néctar se desbordaban entre sus medias oscuras...
-Hazme tuya- le susurró ella
Su hermano había sentido la leve humedad de Takara, sin pensarlo más el bajó hacia la falda de su hermana e introdujo su rostro debajo de ella. Takara sentía como el le besaba las piernas, las mordisqueaba y las lamia, fueron momentos intensos hasta que el con sus manos le bajó un poco sus medias oscuras al tiempo que las rompía en la parte interna cerca a su intimidad, las gotas del néctar de Takara se liberaban un poco más mientras el comenzaba a succionarlas, nuevamente ella sintió los dedos de su hermano, pero está vez bajaba su ropa interior de encaje y sintió como su lengua comenzó a recorrer su vagina. Era una sensación exquisita, la lengua de su hermano bebía toda la esencia de su hermana Takara.
Ella comenzaba a gemir intensamente, sentía como la lengua de su hermano penetraba su intimidad, toda su zona vaginal era recorrida pero se sobresaltó al sentír que aquella lengua llegase hasta sus nalgas, más precisamente sintió como la lengua de su hermano por cortos instantes acarició su ano. El sexo de Takara comenzaba a palpitar, su hermano estaba haciéndole sexo oral de una manera tan intensa, ella apretó sus muslos en su rostro, ella deseaba que la disfrutase al máximo, era suya, solamente suya, las sensaciones eran intensas y Takara liberó un orgasmo intenso, ella gemia ante tal placer y su hermano bebía de aquel exquisito néctar, el sabor de su hermana era una delicia y aquello apenas era el aperitivo de esa noche...
Momentos después los gemidos de Takara se escuchaban en toda la habitación, ella estaba entre las sábanas de su cama mientras su hermano le hacia el amor apasionadamente, Takara gemia al sentír como su hermano le devoraba los senos, sentía como los succionaba, los mordía y los besaba con pasión al tiempo que el se movía dentro de ella con movimientos intensos mientras que sus manos le acariciaban las piernas, ella sentía delirar entre tanto placer, desnuda con su hermano, amándose sin parar.
