Franco Colucci
Cuando somos jóvenes nos queremos acabar el mundo de un bocado, creemos que vamos a vivir para siempre y que somos invulnerables.
Tal vez por eso cometemos tantas tonterías siendo unos muchachos y realizamos actos que pueden tener consecuencias fatales e irreversibles. Habrá quien nos escuche a los adultos, los sobrevivientes de esa fiesta impetuosa llamada juventud.No te olvides de votar y dejar tu comentario.