PÉGATE A MÍ... OTRA VEZ

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No pude evitarlo entre el reportaje, pues los últimos dos sets del partido entre Japón y Noruega, Bokuto y Hinata se habían lucido con sus remates, Tsukki no dejó entrar casi ningún remate y el punto final lo había dado UshiWaka.
Mi emoción era imposible de disimular, pues incluso llegué a gritar con el micrófono en mano todavía y en vivo.

Claramente ahora toda la audiencia televisiva sabía a qué equipo apoyaba. Pero poco me importó.

Noruega quedó eliminado del torneo, y Japón avanzó a octavos de final.
Había un largo camino que recorrer para ellos, y debían superar a más equipos en las próximas semanas.

Hinata: ¡Fué increíble, hice "bang", y luego "fuá", y después...!

Sebastian se encontraba entrevistando a mi amigo y a todo el equipo, me había visto en la obligación de no acercarme a ellos para evitar que la prensa me metiera en más problemas con mi padre, aunque quería llevarle la contraria por supuesto que me daba miedo.

Mi vista se perdió por un momento en los movimientos de Tsukishima al acomodar sus gafas, era bastante obvio que no iba a responder ninguna pregunta que le hiciera Seb.

No podía reprimirlo, Tsukki aún me provocaba esa sensación de querer darle un golpe y luego pegarme a su brazo.

Inesperadamente para mí, Tsukishima volteó a verme, fué entonces en que me dí cuenta de que la entrevista había terminado.

Sebastian: listo, vámonos.

Tsukishima: _____...

Interrumpió el Poste de Luz. Únicamente ví a Seb parar en seco, sin embargo, no volteó ni dijo absolutamente nada, pero su expresión rígida me decía que no estaba del todo contento porque tuviera interacción con el jugador más alto de la liga japonesa.

Yo no respondí, y solo volteé a ver a Tsukki.

Tsukishima: te veo a las 8:30 donde mismo.

Y dicho eso se dió media vuelta, alejándose rápidamente.

Andrew: entonces... ¿Vamos a volver a la agencia o...?

Sebastian: regresen ustedes, yo tengo otros asuntos que atender.

Entendía el hecho de que Sebastian estuviese molesto, pero sinceramente no me arrepentía de nada, iba a salir con Tsukki esa noche, y nada me iba a detener...

Sin embargo, había un insignificante detallito, nada importante...

¡¿En dónde es "donde siempre"?!

Andrew: _____.

La voz de mi amigo me hizo reaccionar.

Andrew: vamos, debemos reportarnos con tu padre para que nos libere éste día.

Ya no respondí y me fuí detrás de Andrew hasta su moto que estaba estacionada frente al pabellón de voleybol.

El resto del día solo fueron ediciones del reportaje, una reunión sobre el día siguiente y qué torneos cubriríamos cada uno, y demás cosas aburridas del mundo laboral.
Por suerte, me tocaba cubrir una vez más el torneo de Japón contra Australia, así que estaba feliz de poder ver a Tsukishima una vez más.

Llegadas las 8 de la noche, yo estaba lista para ver a mi ex novio, sin embargo, seguía sin saber a dónde ir exactamente.

Creo que si no fuera tan despistada captaría más rápido las referencias, ¡Oh Dios, ilumíname por favor!