–No te me acerques no te quiero ver eres un hijo de puta por qué con ella cabrón–Grita Aneley furiosa mientras todos miramos fijamente lo que está pasando.
–Te lo puedo explicar amor escúchame– Intentaba explicar Rubén.
–No vuelvas a decir amor porque te juro que te mató–Dijo gritando nuevamente.
–Aneley no te comportes como una niña ostia, vamos a hablar –Dijo Rubén levantando un poco la voz.
–Como una niña dice–Dijo bajando el tomo de voz.
–Vete–Dijo quedando quieta con la mirada en la piscina.
–¿Qué dices?–Rubén estaba asombrado de lo que acababa de oír.
–Que te vayas, que no te quiero volver a ver en mi puta vida, terminamos–Dijo Aneley y empezó a caminar hacia la casa. Puede ver como se limpiaba las lágrimas.
Rubén comenzó a caminar e intento alcanzarla, pero Felipe intervino metiéndose en medio para evitar que llegará a ella. Todos caminamos hacia ellos.
–¿Qué haces?, quítate del medio o no respondo–Rubén se dirigió hacia él con un tono bastante amenazador.
–Mira tío déjate de estupideces ya. Este no es el momento para hablar, ya lo hablaréis mañana. Camina tira para el coche–Felipe parecía todo un dios enfrentándose a la bestia enfurecida de Rubén.
–Voy a llevarlo a casa ustedes cuiden de ella–Dijo Felipe mirándonos a todos, luego busco mi mirada. Nos miramos por varios segundos, sus ojos verdes estaban conectados a los míos. Comenzó a caminar y dirigió hacia el coche.
Todos entramos en busca de Aneley. La cual estaba sentada en la escalera con Amaia, Alisson, Isabela y Kendall. Caminé hasta ella y me senté al lado de Aneley y le pasé la mano por encima del hombro abrazándola. Ella correspondió el abrazo y empezó a llorar. Amaia se unió al abrazo y así las otras chicas. Fran y Julio entendieron que este era un momento de chicas y se fueron.
–Ay que linda la escenita parece de película os veis tan patéticas–Dijo Débora con su horrible voz de pito.
Aneley levanto la vista, de pronto se paró de la escalera y empezó a caminar muy rápido hacia Débora que estaba apoyada en la pared.
–Te voy a borrar esa sonrisa te lo juro–Dije Aneley llegando hasta ella.
–Uy que miedo te tengo, mira como tiemblo. Yo no tengo la culpa de que tu noviecito me prefiera a mí–Ese fue el detonante para ver la mejor escena que iba a ver en mi vida.
Aneley levanto su mano y le pego una cachetada a Débora haciendo un ruido ensordecedor. Débora se colocó la mano en la mejilla frotándosela. En su mirada había odio.
–Eres una zorra que se mete con los novios de las demás–Dije Aneley con una mirada desafiante.
Débora estaba a punto de devolverle la cachetada cuando Fran se me metió en medio de las dos.
–Vete de mi fiesta Débora–Dijo Fran señalando la puerta.
–Si va a hacer lo mejor–Dije acercándome a ellos.
–A nosotros nadie nos va a echar de la esta fiesta gente chusma– Dijo Ander metiendo sus narices en el asunto. Como siempre metiéndose donde no lo llaman. Oírlo a hablar me hizo hervir la sangre.
–Ni que fueras el rey para decir eso. Mejor recoge tus cosas, a tu amiguita y empieza a caminar antes de que los echen a patadas–Sentencié con voz firme mientras señalaba la puerta.
–Si mejor váyanse–Dijo Amaia apoyándome.
Ander tomó sus cosas, a la insoportable de su amiga y se marcharon no sin antes decir algunos insultos y amenazas.
–Saben que–Dijo Aneley gritando por encima de la música que había de fondo haciéndonos mirarla.
–Ya ni voy a llorar más demen una botella que esto es una fiesta y la voy a disfrutar–Dijo Aneley, camino hacia la barra tomó una botella. Fue hasta donde estaban bailando, se unió al baile y empezó a tomar.
Fran, Julio, Kendall, Isabela y Alisson la acompañaron. Amaia y yo nos quedamos paradas solas. Mire a Amaia, ella miró, yo me encongi de hombros, las dos empezamos a reír mientras caminábamos a donde estaban los demás y nos unimos a la fiesta. No recuerdo mucho solamente que bebimos sin parar. Todos estábamos divirtiéndonos, ya muchos estaban borrachos. Fui a por otro trago para calmar mi sed después de tanto bailar. Le pedí un trago al chico que había contratado Fran para atender la barra. Mientras esperaba apoyada en la barra a que llegará mi trago me perdí en mis pensamientos. Sentí una presencia detrás de mí, unas manos pasaron una a cada lado de mi cintura y se apoyaron en la barra. Podía sentir su respiración en mi cuello y olí su perfume. Un perfume inconfundible para mí. Me volteé para quedar frente a unos hermosos ojos verdes. No dijo nada solamente empezó a acercarse hasta que por segunda vez en la noche su boca estaba a centímetros de la mía.
–No sé porque, pero desde el baile en la piscina únicamente lo tengo una idea en la cabeza y es besarte–Dijo acercándose a mi oído.
–Me muero por sentir tus labios en los míos, te quiero para mí –Dijo volviendo a mirarme otra vez a los ojos. Se acercó y nuestros labios se rozaron.
–Señorita aquí tiene su trago–Dijo el muchacho poniendo mi trago en la barra. Tome mi trago de una y quite la mano de Felipe saliendo de la posición en la que estábamos.
Comencé a caminar y llegué a donde estaban los chicos. Felipe me siguió. Ya no quedaba mucha gente nada más Isabela, Amaia, Fran, Aneley, Adrian el hermano de Amaia y Eduard el hijo del director y enamorado secreto de Isabela. Todos estaban sentados en círculo con una botella en el medio. Me senté entre Amaia e Isabela y Felipe se sentó frente a mí. En ningún momento quieto su mirada de la mía ya sentía la tensión que había entre nosotros.
–Bueno ya estamos todos, que comience el juego– Dijo Isabela con una sonrisa malvada.
HOLA CHIC@S
ESPERO QUE OS ESTE
GUSTANDO. PORFA DEJEN
SU ESTRELLITA Y
COMENTARIO
GRACIAS POR
LEER
😘
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Entre Amor Y Venganza
Teen FictionUna historia de amor y venganza con giros inesperados para todas las edades