Entre Amor Y Venganza

Capítulo 6

Mientras bailamos Sebas me contó un poco de su vida en estos años y yo le conté un poco de la mía. Habíamos hablado un poco por teléfono pero no era lo mismo. Le extrañaba demasiado y estaba encantada de que estuviera aquí. Le abracé con fuerza.

—Sabes te he extrañado tanto—Dije mirándolo a los ojos.

—Yo también, aunque no pensé que cuando te volviera a ver pudiera sentir lo mismo que hace unos años atrás—Dijo acercándose un poco.

—¿Qué dices?—Pregunté para entender a que se refería.

—Ya sabes lo que sentía por ti, nunca fue un secreto y no se me ha quitado la idea de la cabeza de que tu seas mi novia. Y lo vas ser muy pronto voy a hacer todo por conquistarte— Dijo Sebas mirándome a los ojos con una mirada tan profunda que me intimidada.

Trage saliba pesadamente mientras trataba de asimilar lo que acababa de escuchar. Pensaba que el deseo de Sebas de estar conmigo se había quedado años atrás. Estaba aturdida podía oír los latidos de mi corazón incluso por encima de la música.

—No se que decir—Dije por fin después de unos segundos de silencio.

—No digas nada, solo quería que lo supieras nena—Dijo acercándose peligrosamente a mí cara.

Estaba tan cerca que podía sentir su aliento. De repente Sebas se aparto de mi y un con agil movimiento Felipe me coloco detrás de él después de haber empujado a Sebas.

—Qué haces imbécil—Dijo Sebas devolviendole el empujón a Felipe.

—No te quiero cerca de ella—Dijo Felipe con un tono amenazador.

—Y quien eres tú su novio pringao—Dijo Sebas acercándose peligrosamente.

—Y si lo fuera que pasa—Dijo Felipe en repuesta a Sebas.

—Que dices Felipe, tu y yo no somos nada, tu novia esta ahí así que no vengas a molestar donde no se te llama—Dije en tono tan serio que hasta mi me dolió la hostilidad de mi tono y me puse en medio de ellos dos.

—No te metas Liss—Dijo Felipe quitándome del medio y colocandome detrás de él otra vez.

—No me llames así—Dije mientras le pegaba en la espalda sin causar nada de daño en su fornido cuerpo.

—A ver gilipollas quítate del medio y déjame continuar bailando con ella porque me estoy empezando cansar, que yo se sepa no eres nadie para decirme que no me puedo acercar a ella—Dije Sebas en tono tranquilo.

  Felipe le dio en puñetazo en la nariz a Sebas que le hizo hechar la cabeza hacia atrás. Sebas le delvolvió el puñetazo y menos de diez segundos estaban los dos en el piso y todos a nuestro alrededor. Débora gritaba como loca. Rubén y Fran los separaron y yo me puse en medio de ellos dos.

—Todo esto es tu culpa por qué tienes que joderlo todo—Soltó Débora armando un berinche.

Ni siquiera la escuche escuche estaba tan enojada que me hervía la sangre y sentía presión en mis oídos. Miré a Sebas que tenía la nariz rota y sentí unas ganas inmensas de llorar.

—Estoy bien—Dijo moviendo los labios lo que me dio un poco de tranquilidad.

—Estas loco, que mierda te pasa—Dije girando hacia Felipe.

—No entiendes nada Liss— Dijo acercándose hacia a mi ignorando a Sebas, al cual había dejado tirado en el piso sangrando.

—Que tengo que entender que te comportas como un idiota, eso tengo que entender. Que si no puedes tener todo empiezas a molestar—Dije no tan alto como antes pero lo suficiente fuerte para demostrar lo enfadada que estaba.

Le pase pero el lado y recogí mi bolso que había caído en el suelo junto con mi celular, el cual estaba destrozado. Caminé hasta Sebas y lo ayude a levantarse.

—Vamonos porfavor—Le dije a Sebas con un hilo de voz y las lágrimas a punto de salir mis ojos.

—Claro—Me respondió Sebas colocando un mechón de cabello detrás de mi oreja de una forma tan tierna que me hizo sentir tranquilidad.

Tomó mi mano y tiró de mi para empezar a caminar hacia la salida. Cuando pasé junto a Felipe detuve un poco el paso.

—Déjame en paz—Le dije a Felipe en los dos segundos en los que pasé por su lado.

Al salir por la puerta el aire frío de la noche rozo mi rostro haciendo que me estremeciera. Había un poco de frío y Sebas lo notó, ya que se quieto la chaqueta y me la colocó sobre los hombros. Sentí el calor inmediato de la pieza que me cubría y continuamos caminado hacia el estacionamiento, aunque yo solo caminaba por inercia.

Llegamos hasta una moto negra que estaba en el estacionamiento. Era bastante imponente y bonita. Sebas me extendió un casco morado y el se quedó con el azul y yo me quedé sin palabras.

—Llevas un casco de mi color favorito en tu moto—Dije mirándo el casco algo confundida.

—Siempre te llevó conmigo a donde voy Liss, eras mi brújula todos estos años que estuve fuera—Dijo dando un paso y acortando la distancia que había entre nosotros.

—Eso es muy lindo, pero ni de chiste me voy a montar ahí—Dije señalando la linda pero peligrosa moto.

—Por favor vamos confía en mi nena y la otra opción seria irnos caminando y llevarte hasta tu casa en mis brazos sería cansado—Dijo subiendo a la moto.

—¿Cómo?—Pregunté confundida.

—No pensaste que te dejaría caminar con esos zapatos—Dijo poniéndose el casco y yo miré mis pies.

—Esta bien vamos, pero no quiero llegar a mi casa—Dije mientras me ponía el casco y me subía a la moto.

Solo eso basto para que Sebas se pusiera en marcha. Sebas se incorporó a la avenida principal. Abracé muy fuerte su cintura y cerré mis ojos al sentir la brisa acariciar mi cuerpo y cabello voló libre. Se sentía bien sentir libertad. Todavía no entendía nada de lo que había pasado pero solo me dejé llevar por la compañía de Sebas. Luego de un tiempo llegamos a un lugar que pensé que él ya había olvidado después de tantos años. Era nuestro lugar cuando eras niños. Detuvo la moto y nos bajamos. Caminamos hasta en banco que había que daba la mejor vista de la ciudad y nos sentamos.

—Gracias—Fue lo único que pude decir mientras ponía la cabeza en hombro y miraba la luna.

—No tienes que agradecer nada nena—Dijo haciendo que lo mirará.

—¿Te duele?—Pregunté mirando su rostro y tocando la pequeña grieta con sangre en su labio.

—Auch, ja ja ja—sonreí—No tranquila, no me duele nena—Su respuesta me tranquilizó y el lo pudo ver en mi pequeña sonrisa.

—No pares de sonreír nunca Liss—Dijo tomándome del mentón y acercándose a mi. Cerré mis ojos ante el roce de sus dedos y me deje llevar al sentir sus labios sobre los míos.

HOLA CHIC@S
ESPERO QUE OS ESTE
GUSTANDO. PORFA DEJEN
SU ESTRELLITA
Y COMENTARIO
GRACIAS POR
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😘