Rise of Sodom and Gomorrah - Jujutsu Kaisen

Capítulo 5: Vino

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Nota: Tengo que poner sobre aviso. Este capítulo contiene descripciones sobre sexo violento (no es violación). Creo que son tolerables a comparación de otras cosas que he leído donde hay más sangre y dolor... digamos que es vainilla con un toque ligero de agresividad. Esto es desde mi percepción puedo considerarlo tranquilo pero porque soy una pervertida, si eres nuevo en todo este mundo no estoy segura de que te parezca algo tranquilo. No es con respecto al Nanago pero si involucra a Nanami.

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El fin de semana Nanami lo había aprovechado para gastar el bono que le habían dado en el trabajo para amueblar su casa. Claro que al forzarlos a mudarse la Santa Sede estaba obligada a pagar todas las molestias que ello generaba. Con ese dinero Nanami compró una estufa, un refrigerador y un microondas y desde luego algo de despensa, los primeros días había tenido que mandar a pedir comida a falta de todo eso.

Haber salido a realizar todas las compras él solo había sido extraño, aun tenía esa necesidad de que si se alejaba demasiado de Haibara tendría una descarga paralizante. Pero pronto comenzó a perder el miedo y a disfrutar de las cosas. Por la tarde regresó a casa y comenzó a pensar en un plan a largo plazo para la remodelación de la casa. Puff haber elegido ese lugar sí que le generaba un gran compromiso pero estaba dispuesto a trabajar en la remodelación los fines de semana.

Necesitaría todo nuevo. Comenzaría por remodelar la cocina y luego la sala... ese era el plan hasta que se dio cuenta de que no podía hacer todo por secciones pues el baño necesitaba atención. Podía arreglar algunas cosas allí como la ducha, la tina y tuberías pero tendría que dejar para luego las paredes y el suelo. Iría poco a poco. Como terminó de limpiar un poco tomó su abrigó y salió a dar una vuelta a aquel parque que le había mencionado Haibara a dos cuadras de su casa. En efecto habían muchas personas y ninguno parecía verlo distinto ahora que no tenía un collar... bien podía pasar como un humano ordinario. Estuvo sentado en una banca cualquiera mirando hacia un pequeño lago artificial. Ese sería su lugar favorito a partir de ahora.

Al volver a casa después de pasar su pequeña reja notó una silueta sentada en los escalones que llevaban al pequeño pórtico de su casa. Esta silueta se puso de pie al verlo acercarse por el camino empedrado. Nanami pensó que era Haibara... pero él le llamaría primero a su celular. No esperaba encontrarse a Higuruma allí.

—Hola... yo. Traje algo de cenar y vino, tu favorito.

Estaba bien que Nanami considerara que era mejor discutir en vez de su silencio, al menos no lo dejaría pensando un millón de cosas, pero ahora tenía pereza de enfrentar las cosas. Sí, Nanami estaba algo disgustado por su distanciamiento, lo entendía... pero no estaba sumamente enojado, Higuruma al parecer entendía que sí y por eso había recurrido a la vieja táctica de "traje tu favorito". Nanami no dijo nada... porque para su desgracia le parecía adorable que hiciera esas cosas. Pasó de largo y abrió la puerta, encendió las luces de la entrada y de la casa y dejó la puerta abierta... Vamos, si iban a competir por quién era más frío claro que Nanami ganaba. Higuruma pasó y cerró la puerta, lo siguió hasta la cocina viendo cada detalle de la casa y... comenzó a hacer plática.

—Es... una casa vieja ¿no crees? Creí que escogerías algo moderno listo para ser habitado.

—Me gusta —contestó Nanami sin mirarlo, buscaba algunos platos y copas— Haibara dice que parece un pequeño castillo.

—Sí... es por la fachada de piedra y la torre que tiene, por eso digo que parece una casa vieja. Es acogedora.

—Mientes... —soltó en un tono ronco y ligeramente burlón y caminó con los platos hasta la sala.