Rivals | SasuNaru.

one

—Uzumaki y Uchiha a Dirección! Ahora! –el grito furioso de su profesor hizo los nombrados detuvieran su acalorada discusión en medio del pasillo-.

Ambos menores se dieron una mirada de muerte antes de empezar a caminar a paso pesado al despacho de la directora, ya ni se molestaban en llevarle la contra a su profesor, era la sexta vez en la semana que esto pasaba, era una suerte que aún no los hayan expulsado del establecimiento aún

—Esto es tu culpa Dobe, si no fueras tan idiota esto no hubiera pasado –el alfa no se contuvo de hecharle toda la culpa al omega que caminaba a su lado-.

—A quien llamas idiota, Imbécil?! –respondió con rabia– te crees el mejor por ser un alfa con un apellido de renombre, pero adivina que Uchiha –remarco su apellido con desdén– no eres más que un inutil sin eso.

—En eso te equivocas mi querido "principito" –el Uzumaki le dio una mirada de odio al escuchar aquel apodo– quieres que te recuerde quien es el mejor de la clase? no, espera, el mejor de la escuela –le dedico mirada de superioridad al más bajo antes de continuar– nací para ser el mejor sin importar mi apellido, ni mi casta, pero claro, eso no lo podría entender un patético omega como tu.

—Teme! –dijo entre dientes, aguantando las ganas de gritarle al más alto, esa era una de las razones por la que detestaba a la mayoría de alfas, aquel ego que se cargaban era irritante– Ese es tu maldito problema, tu maldita actitud egocéntrica, siempre menospreciando a los demás, no tienes un mínimo de empatia, algún día te llegará el karma, y déjame decirte que te pegara más duro que a nadie –termino de hablar al mismo tiempo que arreglaba su uniforme, ya se encontraban frente a la oficina de la directora, y si no quería aumentar su castigo, lo mejor era verse presentable-.

—Hablo el principito de los Uzumakis –él Uchiha rodó los ojos con ironía– que irónico que seas tu quien me dice estas cosas Usuratonkachi

—La forma en que me protege mi clan no tiene nada que ver con esto! –reprocho sin controlar el volumen de su voz-.

—Naruto! –el grito de la directora hizo que el rubio de un respingo, habia olvidado que se encontraban frente a la oficina de la mayor– no puedo creerlo –dijo mientras acariciaba su frente con cansancio– es la sexta vez en la semana que los envían aquí –habló con enojo mientras hacía entrar a ambos menores a su oficina– porque fue esta ves? No, déjame adivinar, volvieron a crear un revuelo en el pasillo por culpa de sus discusiones –ambos aparaton la mirada avergonzados– se quedarán a limpiar la bodega como castigo.

—Pero abue-! –trato de debatir Naruto, pero fue interrumpido por la Adulta-.

—Nada de peros, Naruto, esto no puede seguir así, ambos tienen que aprender a comportarse, ya no son unos niños pequeños –bajaron la mirada con frustración-.

Este sería un largo día...

【 ☆ 】

—Apúrate Dobe, no tengo todo el día –murmuró el Uchiha mientras veía al blondo acomodar unas cosas de una repisa– eres demasiado lento –se quejo mientras se acomodaba en su asiento-.

—Avanzariamos más rápido si me estuvieras ayudando, estúpido Teme –le respondió el rubio con claro enojo en su voz, todo este tiempo él era quien se había dedicado a limpiar, mientras el más alto solo se le quedaba mirando desde su silla-.

—Por qué debería ayudarte? Que yo recuerde nada de esto fue mi culpa –renegó con pereza el azabache-.

—Claro que lo fue! –chilló el omega-.