La mascota.

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Había una vez un joven llamado Liao (yo) y la verdad es que desde niño fui ayudante en la herrería, taller y compañero de leñador de mi padre por consecuencia yo era obviamente de una complexión atlética y robusta. Al menos hasta que mi padre falleció, yo seguía siendo relativamente joven, 25 años .

Yo seguí con el negocio de mi padre hasta que un día mientras cortaba leña, olí algo que me hizo sentir el hambre de mi vida, cerca había una cabaña con un hombre débil y anciano o al menos eso aparentaba

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Yo seguí con el negocio de mi padre hasta que un día mientras cortaba leña, olí algo que me hizo sentir el hambre de mi vida, cerca había una cabaña con un hombre débil y anciano o al menos eso aparentaba. Decidí no molestar y mejor regresar a mi casa, pero no había un regreso, era como si el bosque se hubiera movido. Sin más opciones y con mucha pena me acerque a pedir ayuda al anciano.

El tipo sin dudas no era débil y anciano, bueno si era un anciano, pero uno bien cuidado y en forma. El hombre acepto ayudarme, así que me invitó un tazón de comida, era mucha y muy sabrosa, no pude resistir y comencé a comer cómo si no hubiera un mañana, mientras el hombre me miraba con una mirada que puedo solo describir como impaciente, le pregunté por qué me miraba así, pero antes de obtener una respuesta caí inconsciente al suelo. Al despertar estaba básicamente desnudo y atado a mis brazos y piernas acostado en una cama .


El me dijo que el era un brujo muy viejo y que necesitaba una mascota para que pueda alargar más su vida. ¿Y cómo está relacionado todo esto? te preguntas, bueno pues, resulta que yo ahora soy la mascota y mi único deber es comer y comer para volverme gordo y el pueda seguir viviendo. Una vez explicado su plan comenzó a engordarme, comida, comida y más comida entraba a través de una especie de manguera para alimentos, cada 3 horas me alimentaba con delicias. Nunca dejaba mi estómago vacío.
Al principio me resistí pero no sirvió de nada no podría dejar de comer y creo que eran alimentos mágicos porque engorde muy rápido.

Empecé a disfrutar de su comida y el me recompensa soltandome y con más y más y cada vez más, esa sensación de estar gordo y saber que el se encargará de que nunca pase hambre me hizo amar ésto y gracias a su propia magia en cuestión de semanas fá...

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Empecé a disfrutar de su comida y el me recompensa soltandome y con más y más y cada vez más, esa sensación de estar gordo y saber que el se encargará de que nunca pase hambre me hizo amar ésto y gracias a su propia magia en cuestión de semanas fácilmente ya habría subido unos 130 kilos además de los que ya tenía, el me propuso ser su mascota compañero por siglos, solo tenía que engordar a alguien al igual que el hizo conmigo y así ambos vivimos de engordar, el a mi y yo a el y aveces a un nuevo amigo y dejarlo más obeso que yo .

Empecé a disfrutar de su comida y el me recompensa soltandome y con más y más y cada vez más, esa sensación de estar gordo y saber que el se encargará de que nunca pase hambre me hizo amar ésto y gracias a su propia magia en cuestión de semanas fá...

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fantasías de gordos :)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora