CIRCUS (The Golden Hour) || Minsung

VI

Ambas miradas conectadas, dos luceros brillantes en una explosión de brillo por cada latido demostrando la emoción de tan solo verse a los ojos.

Era él, ese chico del circo que se había adueñado de su mente. No sabía ni su nombre y ya estaba en cada pensamiento del día. Gran jugada, Jisung.

Minho no podía reaccionar, estaba en alguna clase shock. Y claro, después de lo que había pasado en tanl solo 2 días, era obvio.

El rubio de al frente le sonreía, cosa que lo emocionaba en medio de ese shock donde sólo le miraba a él.

Los ojos de Minho parecían dos galaxias del brillo que había por ver a ese chico que le volvía loco, casi literalmente.

-Bin, ¿estás seguro de que Minho está bien?- preguntó ladeando su cabeza un poco y con una cara de preocupación pero aún manteniendo la sonrisa.

-Está en shock, Sung- dijo despreocupado, sabía que la impresión en Minho era algo normal, y también sabía como hacerlo reaccionar- tranquilo, sé qué hacer.

Dió un ligero suspiro y entró al apartamento. Tomó del hombro a Minho y dijo...

-Lee, reacciona, el amor de tu vida está aquí- obvio se refería a Jisung, era notable la química entre esos dos sin cruzar tantas palabras y miradas, se sentía en el aire.

Jisung enrojeció y miraba al pelinegro con una mirada que decía "¿cómo dices que dijiste?", sabía que Changbin bromeaba, o eso creía él.

Y dicho y hecho, Minho reaccionó de alguna forma, no dejaba de parpadear.

-¡¿T-tú?!- soltó Minho. Intacto en su lugar, mientras veía a ese lindo rubio.

-Yo, Minho. Ni siquiera me he presentado- que descortés, Han- Soy Han Jisung- dijo acompañando con una reverencia, y, realmente, muy en el fondo los nervios le comían vivo.

La mirada de Minho decía "¿esto es real? ¿De verdad está aquí? ¿de verdad es él?". Y esque tantas "alucinaciones", "delirios" y tormentas de pensamientos pondrían de cabeza a cualquiera, te volvería loco casi literalmente.

Podría jurar que era un sueño más si no fuese por la voz del pelinegro que le aturdía con esa frase de "el amor de tu vida".

Su cuerpo reaccionó, sus piernas dieron 2 pasos hacia adelante, sus brazos se extendieron para pasar entre la cintura y brazos de Han, y su cabeza terminó por hundirse en el cuello de ese chico rubio. Ambos se hundían en un profundo abrazo que, por ambos, era bastante esperado.

Han respondió a dicho abrazo con la sonrisa más radiante del mundo, sonreía mientras sentía que volaba en su propio cielo con Minho. De alguna forma y prácticamente sin conocerlo, le importaba, se sentía mal por irse sin explicaciones aunque no fuese su culpa, sentía que debía quedarse con el castaño.

Al menos 1 o 2 minutos estuvieron abrazados, Minho lloraba y mantenía un rostro completamente rojo, mientras que Han soltaba una que otra lagrimilla que se escapaba y seguía con su sonrisa totalmente extendida. Después de dicho tiempo, Changbin interrumpió un poco.

-Bueno, par de chicos, yo no quiero ser mal tercio, así que me iré- dijo con esa sonrisa ladina que hacía notar aún más la situación que estaba presente, el sentimiento que les invadía a todos.

Con esto dicho, ambos chicos se separaron de ese casi eterno y cálido abrazo.

-Espera, Bin- replicó Han- no piensas que me quedaré aquí, ¿verdad?- dijo con algo de nervios, notorio hasta en su voz.

-Bueno, es tarde para que alguien nuevo ande solo en la ciudad buscando un hotel; yo debo irme con mi madre a cuidarla esta noche, así que no puedo acompañarte y...- se acercó al oído de Han para decirle algo más en "secreto"- déjate ayudar, Han- las orejas de Han enrojecieron, esperaba todo menos esa clase de ayuda.