UNDERHIGHSCHOOL ;; sancest

── Prólogo ☆

Centrados entre los mayores del establecimiento podemos interpretar las relaciones entre algunos de ellos. Los viajes entre AU's y AT's no eran un secreto para ningún Sans, varios se conocían y tenían historia entre sí. O también podemos hablar de los hermanos Crayon: Geno, Error y Fresh. El amor fraternal era fuerte, incluso Error los apreciaba a pesar de considerarlos una anomalía que debía ser erradicada. Geno tenía relación con Reaper, literalmente un Dios, el de la muerte. Ambos tenían sentimientos románticos hacia el otro y no dudaban en expresarlo, mas Reaper era aquél más meloso y pegajoso. Era una linda pareja, incluso ideal a ojos ajenos, incluso divertida ante los intentos del de bufanda pidiendo espacio personal. Error tuvo un pasado con Ink, el protector de AU's estaba obsesionado con el destructor, no paraba de seguirlo y darle regalos, no paró hasta que el esqueleto glitcheado aceptó ser su novio. Error no le correspondía solo porque pensaba que era una broma, una de muy mal gusto; Ink no tiene alma, por lo tanto no tiene sentimientos, por esto mismo Error lo rechazaba.

Un ser sin alma es un cascarón vacío, pero gracias a los vitales Ink puede tener emociones, lo que sentía era una fascinación por Error. Le interesaba saber cómo pensaba, cómo actuaba, cómo sentía. Sus pupilas podían dilatarse hasta multiplicar su tamaño en solo pensar en él. No era amor, Ink no podía sentir eso, era obsesión pero él no quería admitirlo. Sentía que había experimentado un sentimiento por primera vez en su vida, no quería perder esto que hacía que su inexistente alma latiera con locura, que el arcoíris que se dibujaba en sus mejillas desapareciera, que aquellas mariposas se escaparan. Sus ojos formaban corazones al ver a su querido Ruru. Por otro lado el glitcheado estaba profundamente enamorado del pintor, ni siquiera negó sus sentimientos pero intentó protegerse, Ink era peligroso, una caja de sorpresas, nunca sabes qué esperar de él, un día opinaba algo y al día siguiente podría criticar todos sus fallos. Ink era un misterio. Como un mapa que solo daba dos indicaciones sin sentido. Natural que Error le tuviera miedo.

Reiteramos en que eso fue en el pasado, ambos esqueletos ya no mantenían una relación romántica, ni amistosa, hubo un punto de quiebre en el que se desconoce el detonante de aquella bomba de tiempo destinada a estallar. Un día como cualquier otro Error decidió cortar el hilo rojo que los unía. Fue duro para ambos, Error lo superó, Ink no pudo dejar el tema.

Honestamente estamos ansiosos por lo que se avecina.