One Shots gays de ASL

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|Fiesta de Koby|

Un amigo de nuestro lindo Luffy lo invitó a él y a sus hermanos a una fiesta que estaba a dos horas de empezar, claramente el menor aceptó sin dudar ni pensarlo un momento.
Comentó el asunto a sus mayores que vivían con él desde niños, y estos asustados por pensar en como se iban a arreglar o si Luffy haría una estupidez.

-hablas enserio? -preguntó Ace mirando a un lado y después a Luffy en repetidas veces-

-Sí! Nos invitó a los tres, y habrá mucha mucha comida y bebidas! Y juegos divertidos para los que se aburran o sean muy serios como tú y Sabo -contó agitado y emocionado el de ojos redondos-

-ah... No creo que los juegos de allá sean necesarios, aquí en casa tenemos muchos lugares para... Jugar los tres -mencionó Sabo con un rubor ligero en su blanco rostro-

-controla a tu monstruoso amiguito, ricitos de oro -le regañó el pecoso mientras le daba un codazo con molestia-

-auch...

-iremos o no?! -gritó el pequeño con el seño fruncido debido a que estaba siendo "ignorado"-

-está bien! Iremos, iremos...

Dicho y hecho, los tres se arreglaron muy atractivos, más no elegantes. Luffy llevaba una playera negra bajo una chaqueta mitad blanca y mitad roja, unos jeans oscuros pero no negros, tenis rojos con detalles blancos, de peinado solo se hizo una coletilla con el poco pelo que le quedaba largo, y como accesorio final un broche de calavera en el pelo; por otro lado Ace iba con camisa de tirantes negra que le quedaba apretada en la parte del pecho, unos pantalones blancos con rotos en las rodillas y líneas naranjas por los lados, tenis naranjas con decoración azabache con forma de fuegos, y como toque final unos lentes de vidrio anaranjado con degradado de rosa intenso por debajo del primer color; Sabo se colocó una playera blanca abajo de un saco no formal de tonalidades azules y moradas, jeans color azul cielo con rotos en toda la parte delantera, tenis azul oscuro sin detalles añadidos, de decoración solo le puso un sombrerito azul pastel con cinta negra de por medio.

Ahora con los tres bien arreglados y listos para atraer perras de los dos géneros, se fueron a la fiesta como los geniales trillizos que son, con música y lentes negros para sentirse más envidiables de lo que ya son.

-chicos! Llegaron rápido, pasen, aún falta para que vengan todos -los recibió el peli rosa con su suave y amable sonrisa-

-Koby!! -gritó el menor mientras corría a abrazar a su amigo-

-h-hola Luffy! No me abraces tanto, m-me sacas e-el aire... -dijo con dificultad por la fuerza que hacía Luffy en el abrazo-

Después del saludo el trío entró al lugar asombrados por como estaba muy bien ordenado y limpio, hasta a Luffy le dió lástima que luego acabaría todo muy sucio y asqueroso, el pobre Koby lo limpiaría sólo, quizás lo haga rápido pero igual le dió mucha lástima; Sabo estaba peor, él era como la madre en la casa, por lo que el alma le dolió, y también las manos al imaginar todo lo que tendría que limpiar Koby al final de la noche.

—desean comer algo? O una bebida refrescante? —cuestionó amablemente el anfitrión—

—No, gracias Koby! —rechazó con alegría Luffy—