The Incubus System [1]

Capítulo 163:

Capítulo 163: Un calor familiar

Tan pronto como salí de mi portal, ya estaba en mi habitación, había desactivado mi forma demoníaca y regresé a mi forma humana.

[¡El portal se ha cerrado!  ]

"¡Hermano!"  dijo Celia.  Al mismo tiempo, Foxy también me llamó.  Y corrieron rápidamente, abrazándome con preocupación.

"Lamento haberte preocupado", dije con una sonrisa mientras los abrazaba.

Solo brevemente, soltaron su abrazo.  Mientras mi mano me quitaba la mascarilla antigripal.

"¿Lo obtuviste?"  preguntó Celia preocupada.  Sabía que esa foto podía poner en peligro nuestras identidades.

“Sí, ya lo borré”, respondí.

"¿Qué le hiciste a ella?"

"Poco.  Solo la amenacé para que no volviera a hacer esta imprudencia.  De todos modos, es demasiado imprudente para ser reportera.

"¿Es ella un chico malo?"  preguntó Foxy.

“Ella no es una mala persona, pero si logra exponer mi identidad, estaremos en peligro”.

"Pero no la lastimaste, ¿verdad?"  preguntó Celia de nuevo.  Parecía que tenía miedo de que su hermano se convirtiera en un asesino.

"Por supuesto que no.  No mataré a gente inocente”, la tranquilicé.

Celia dejó escapar un suspiro de alivio.

“Parece que tenemos que ser más cuidadosos…” Luego se volvió hacia mí.

"Especialmente tu.  No quiero que los cazadores de demonios te atrapen o... Celia guardó silencio, pero yo sabía lo que quería decir.

Acerqué a Celia a mis brazos y le peiné el cabello suavemente.

"Tendré más cuidado".  La calmé y ella respondió abrazándome fuerte.

“Tienes que…” susurró ella.

“Oh, hablando de cazadores de demonios.  Tienes que tener cuidado con Ruby, especialmente con la señora Clea.  Como Celia ya conocía mi identidad, tenía que advertirle sobre esto.

"¿Por qué?"

“Son fuertes cazadores de demonios.  Y la señora Clea es la presidenta de la asociación de cazadores de demonios.

Celia soltó mi abrazo y me miró sorprendida.

“¿No significa eso que ustedes dos viven debajo de sus narices?  ¿No deberías mudarte a otro lugar?  dijo preocupada.

"Está bien.  Pienso que es una cosa buena.  No pensarán que sus vecinos son demonios.  Además, no pueden detectarnos a Foxy ni a mí”, expliqué con calma.

Celia dejó escapar un suspiro de alivio.

"Gracias a dios."

“Oh, una cosa más.  Quiero que evites a Ruby.  Si ella viene, no digas nada sobre nuestra familia y yo”.  Al ver que Ruby vino a mí esta mañana, podría estar tratando de buscar mi información a través de Celia.

"¿Rubí?  ¿Por qué?  Nunca le di nuestra dirección”, dijo con el ceño fruncido.

Foxy, que había estado en silencio, se rió.

"Porque Ruby se enamoró del maestro", dijo en tono de burla.

Celia se volvió hacia mí pidiéndome una explicación.