¿No recuerdas lo que pasó?... Cariño
Sean.
Llego a la fiesta bajando de mi auto con Stella caminando hacia la entrada y... Carajo Sofía estaba ahí regalando una hermosa sonrisa a Chase.
No sabe lo jodidamente hermosa que se ve con ese vestido, resaltando cada parte de su cuerpo, no sabe que se acaba de volver mi fantasía favorita.
– Ire con unas amigas, espero que no te moleste.– Dice Stella mirándome.
Cómo si me fuera a molestar, lo único que quiero es tenerla lejos para poder estar con Sofía.
– Esta bien. – Es lo único que digo entrando al bar.
Empiezo a buscar a Sofía y luego la veo como un corderito asustado en el sofá del bar.
Y sin querer se me escapa una sonrisa que no puedo contener. Me acerco lentamente y ella se levanta y se empieza a acercar lentamente igual.
– ¿Así que quieres jugar?.– Digo sin quitarle la mirada de los labios.
Sin decir todo lo excitado que estoy por ese maldito vestido.
– Tu lo pediste.– Dice sin despegar la mirada de mis ojos.
– ¿Si?... No lo recuerdo.– sigo mirándole esos hermosos labios carnosos que tiene.
– Me hiciste meter en el juego.– Dice acercandoce poco a poco a mí.
Me acerco a su cuello queriendo besarselo.
– Bésame.– Es lo único que sale de mi boca.
– Ya quisieras.– es lo único que dice.
– Bésame y deja de torturarme.– Digo queriendo que me bese de una puta vez.
Se acerca más a mi quedándose un centímetro de mi boca y sigo sin despegar la mirada de sus ojos y lo único que dijo fue.
– Sueña.– Dice mientras pasa por mi lado para seguir a adelante.
Suelto una carcajada, quiere que le ruegue por un beso, no, cuando me vea regandole sería para que me haga un baile mientras se quita la ropa.
– Te estuve buscando.– Reconozco esa ridícula voz que me saca de quicio.
– ¿Para que?.– Digo indiferente.
– ¿Cómo que para que tontito?.– dice sonriendo, si supiera que no me causa nada, ni el mínimo efecto en mi cuerpo.– Para charlar obviamente.
– ¿Y para que están tus "amigas"?, ¿Porque no vas a charlar con ellas?.
– Es que lo quiero hacer contigo.– Dice poniéndome la mano en el pecho.
Con tan solo ver a Sofía quiero ser su maldito esclavo y que juegue conmigo las veces que quiera.
Y con Stella ni tocandome hace algo en mi.
–I don't mind.– es lo único que sale de mi boca y ella se queda perpleja.
Nos sentamos en el bar y ella no paraba de hablar de su vida y yo ni caso le hacía.
ESTÁS LEYENDO
Cuando No Te Conocía
Teen FictionLo hermanos Lee siempre andan en cosas peligrosas y Sofía suele ser la niña que no le gusta el caos después de haber perdido a su padre ¿estará Sofía metida en un lío de los hermanos Lee?...