𝗖𝗮𝘀𝘁𝗶𝗲𝗹: ¿Te molesta? Si quieres me voy |Aguantando las ganas de reír al ver su cara de asombro. |
𝗬𝗲𝗺𝗼𝗻: N-no..., no es eso, simplemente me sorprendí. |Al ver sus manos juntas, formando un vaso de arcilla, se puso aún más nerviosa. |
𝗖𝗮𝘀𝘁𝗶𝗲𝗹: Así está bien, esta es la forma adecuada, ¿entendido? Procura que no se seque, se romperá, señorita torpeza |Riéndose un poco, fue a ayudar también a su prima, que le hacía miraditas a Yemon. |
𝗬𝗲𝗺𝗼𝗻: (Maldita Emily, me las va a pagar..., ¿Cómo se le ocurre hacerme esto? Y porqué me pongo tan nerviosa cuando ese idiota se acerca? Solo es un estúpido chico pelirrojo que se hace el interesante...)
De cualquier modo, la clase concluyó de forma bastante tranquila, o eso pensaba ella.
𝗖𝗮𝘀𝘁𝗶𝗲𝗹: Buen trabajo a todos, no olviden traer el material para el jarrón para empezar uno en parejas mañana |Al ver a Yemon recoger, sonrió de forma perversa y empezó a borrar la pizarra con el material ideal para hacer el jarrón| Yemon, necesito hablar contigo, quédate.
"¿Eh? ¿Le pedirá que se quede? Que suerte..." Esos susurros por parte de las chicas volaban por el aula. Obviamente, Castiel es un chico muy solicitado.
𝗬𝗲𝗺𝗼𝗻: ¿Eh? |Frunció el ceño y recogió todo, luego se acercó hacia él. | ¿Qué pasa?
𝗖𝗮𝘀𝘁𝗶𝗲𝗹: Me pareces una persona muy interesante, la verdad. Creo que en mis clases puedes dar más de tí misma. Creo que estás pasando por un momento difícil, pero la arcilla y yo esperamos ayudarte a calmarte y encontrar tu verdadero yo. Aquí puedes simplemente dejar tus preocupaciones en la taquilla y ser tú misma. |Le aconsejó y le dedicó una sonrisa de ojos cerrados. Una sonrisa muy sincera y llena de buena voluntad. |
En aquel momento Yemon se quedó perpleja, no solamente se preguntaba como es que sabía todo esto, sino que también se replanteaba el como encontró las palabras adecuadas para hacer que su corazón se sienta cálido y seguro. Se preguntaba que porqué sentía eso, que porqué un completo desconocido le conocía más que ella a sí misma.
𝗬𝗲𝗺𝗼𝗻: Yo..., muchas gracias..., siento estar dando problemas o no dar lo mejor de mí, prometo esforzarme más y... |Hablando rápidamente, con la voz temblorosa. |
𝗖𝗮𝘀𝘁𝗶𝗲𝗹: Te equivocas Yemon, ese no es el problema, no debes disculparte. Simplemente debes pensar más en tí misma. No es tus errores o en lo que desde tu perspectiva "haces mal"..., creo que deberías pensar más en como disfrutar más de tu adolescencia y tiempo con amigos y familia.
Aquellas palabras hicieron que finalmente, las lágrimas de Yemon salieran a la luz. El ambiente, sus pensamientos y las palabras de él, hicieron que su lado sentimental dijera "¡Hola! ¡Aquí estoy!"
𝗖𝗮𝘀𝘁𝗶𝗲𝗹: |Al verla llorar se sorprendió un poco y golpeó su cabeza sin hacerle daño, con una revista de instrumentos musicales. | Mira que eres boba..., no pensaste en que podría aprovechar este momento para molestarte, ¿no? |Le sonrió por última vez y se fue tras hablar recogido todas sus pertenencias. |

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La Vida De Yemon
RomansaEsta es una historia de una chica, una chica cualquiera, que va a un Instituto cualquiera. Era así antes de que sus nuevas aventuras comenzaran.